Hebreos 12:5

y estáis ya olvidados de la consolación que como con hijos habla con vosotros, (diciendo): Hijo mío, no menosprecies el castigo del Señor, ni desmayes cuando eres de él redargüido;

Deuteronomio 4:9-10

Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; y las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos.

Job 5:17-18

He aquí, que bienaventurado es el hombre a quien Dios castiga; por tanto no menosprecies la corrección del Todopoderoso.

Proverbios 3:11-12

No deseches, hijo mío, el castigo del SEÑOR; ni te fatigues de su corrección;

Josué 7:7-11

Y Josué dijo: ¡Ah, Señor DIOS! ¿Por qué hiciste pasar a este pueblo el Jordán, para entregarnos en las manos de los amorreos, que nos destruyan? ¡Mejor nos hubiéramos quedado al otro lado del Jordán!

2 Samuel 6:7-10

Y el furor del SEÑOR se encendió contra Uza, y lo hirió allí Dios por aquella temeridad, y cayó allí muerto junto al arca de Dios.

1 Crónicas 13:9-13

Y cuando llegaron a la era de Quidón, Uza extendió su mano al arca para tenerla, porque los bueyes se apartaban.

1 Crónicas 15:12-13

y les dijo: Vosotros que sois los principales de padres entre los levitas, santificaos a vosotros y a vuestros hermanos, y pasad el arca del SEÑOR Dios de Israel al lugar que le he preparado;

Job 34:31

Porque de Dios es decir: Yo perdoné, no destruiré.

Salmos 6:1-2

Al Vencedor: en Neginot sobre Seminit: Salmo de David. SEÑOR, no me reprendas con tu furor, ni me castigues con tu ira.

Salmos 94:12

Bienaventurado el varón a quien tú, JAH, corriges, y en tu ley lo instruyeres;

Salmos 118:18

Me castigó gravemente JAH, mas no me entregó a la muerte.

Salmos 119:16

En tus estatutos me recrearé, no me olvidaré de tus palabras.

Salmos 119:75

Conozco, oh SEÑOR, que tus juicios son la misma justicia, y que en fidelidad me afligiste.

Salmos 119:83

Porque estoy como el odre al humo; mas no he olvidado tus estatutos.

Salmos 119:109

De continuo está mi alma en mi mano; mas no me he olvidado de tu ley.

Proverbios 3:1

Hijo mío, no te olvides de mi ley; y tu corazón guarde mis mandamientos;

Proverbios 4:5

Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; no te olvides ni te apartes de las razones de mi boca;

Jeremías 31:18

Escuchando, oí a Efraín que se lamentaba: Me azotaste, y fui castigado como novillo indómito; conviérteme y seré convertido; porque tú eres el SEÑOR mi Dios.

Mateo 16:9-10

¿No entendéis aún, ni os acordáis de los cinco panes de los cinco mil hombres , y cuántos cestos alzasteis?

Lucas 24:6

No está aquí, mas ha resucitado; acordaos de lo que os habló, cuando aún estaba en Galilea,

Lucas 24:8

Entonces ellas se acordaron de sus palabras,

1 Corintios 11:32

Mas siendo juzgados, somos castigados del Señor, para que no seamos condenados con el mundo.

2 Corintios 4:8-9

En todo somos atribulados, mas no angustiados; dudamos (de nuestra vida) , mas no desesperamos;

2 Corintios 12:9-10

Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque (mi) potencia en la flaqueza se perfecciona. Por tanto, de buena gana me gloriaré de mis flaquezas, para que habite en mí la potencia de Cristo.

Hebreos 12:3-4

Traed pues muchas veces a vuestro pensamiento a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que no os fatiguéis en vuestros ánimos desmayando.

Hebreos 12:7

Si sufrís el castigo, Dios se os presenta como a hijos, porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no castiga?

Santiago 1:12

Bienaventurado el varón que padece con paciencia la tentación, porque cuando fuere probado, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.

Apocalipsis 3:19

Yo reprendo y castigo a todos los que amo: sé pues celoso, y enmiéndate.

Treasury of Scripture Knowledge did not add

Sagradas Escrituras (1569)