Hechos 13:11

Ahora pues, he aquí la mano del Señor es contra ti, y serás ciego, y no verás el sol por un tiempo. Y al instante cayeron sobre él oscuridad y tinieblas; y andando alrededor, buscaba quién le condujese de la mano.

Éxodo 9:3

he aquí la mano de Jehová será sobre tus ganados que están en el campo, caballos, asnos, camellos, vacas y ovejas, con pestilencia gravísima:

Salmos 32:4

Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; mi verdor se volvió en sequedades de estío. (Selah)

1 Samuel 5:11

Y enviaron y reunieron a todos los príncipes de los filisteos, diciendo: Enviad el arca del Dios de Israel, y vuélvase a su lugar, y no nos mate a nosotros y a nuestro pueblo; porque había pánico de muerte en toda la ciudad, y la mano de Dios se había allí agravado.

Job 19:21

Oh, vosotros mis amigos, tened compasión de mí, tened compasión de mí, porque la mano de Dios me ha tocado.

Génesis 19:11

Y a los hombres que estaban a la puerta de la casa desde el menor hasta el mayor, hirieron con ceguera; de modo que ellos se fatigaban buscando la puerta.

1 Samuel 5:6-7

Y se agravó la mano de Jehová sobre los de Asdod, y los destruyó, y los hirió con hemorroides en Asdod y en todos sus términos.

1 Samuel 5:9

Y aconteció que cuando la hubieron pasado, la mano de Jehová fue contra la ciudad con gran quebrantamiento; e hirió a los hombres de aquella ciudad desde el chico hasta el grande, y se llenaron de hemorroides.

2 Reyes 6:8

Tenía el rey de Siria guerra contra Israel, y consultando con sus siervos, dijo: En tal y tal lugar estará mi campamento.

Salmos 38:2

Porque tus saetas cayeron sobre mí, y sobre mí ha descendido tu mano.

Salmos 39:10-11

Quita de sobre mí tu plaga; bajo los golpes de tu mano estoy consumido.

Isaías 29:10

Porque Jehová derramó sobre vosotros espíritu de sueño, y cerró vuestros ojos; puso velo sobre vuestros profetas principales, los videntes.

Juan 9:39

Y dijo Jesús: Para juicio yo he venido a este mundo, para que los que no ven, vean; y los que ven, sean cegados.

Hechos 9:8-9

Entonces Saulo se levantó de tierra, y abriendo los ojos, no veía a nadie; así que, llevándole de la mano, lo trajeron a Damasco.

Hechos 9:17

Y Ananías fue y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recobres la vista y seas lleno del Espíritu Santo.

Romanos 11:7-10

¿Qué entonces? Lo que buscaba Israel no lo ha alcanzado, pero los elegidos lo han alcanzado, y los demás fueron cegados.

Romanos 11:25

Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en vosotros mismos, que en parte el endurecimiento ha acontecido a Israel, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles;

Hebreos 10:31

Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo.

2 Pedro 2:17

Éstos son fuentes sin agua, y nubes empujadas por la tempestad; para los cuales está guardada la oscuridad de las tinieblas para siempre.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)