Hechos 23:5

Y Pablo dijo: No sabía, hermanos, que era el sumo sacerdote; pues escrito está: No maldecirás al príncipe de tu pueblo.

Éxodo 22:28

A los jueces no injuriarás, ni maldecirás al príncipe de tu pueblo.

Eclesiastés 10:20

Ni aun en tu pensamiento digas mal del rey, ni en los secretos de tu cámara digas mal del rico; porque las aves del cielo llevarán la voz, y las que tienen alas harán saber la palabra.

Hechos 24:17

Mas pasados muchos años, vine a hacer limosnas a mi nación, y ofrendas.

2 Pedro 2:10

y principalmente a aquellos que siguen la carne en la concupiscencia de inmundicia, y menosprecian todo gobierno. Atrevidos, contumaces, que no temen decir mal de las potestades superiores.

Judas 1:8-9

De la misma manera también estos soñadores mancillan la carne, rechazan la autoridad y maldicen a las potestades superiores.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)