Hechos 8:39

Y cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y gozoso, siguió su camino.

1 Reyes 18:12

Y acontecerá que, luego que yo me haya ido de ti, el Espíritu de Jehová te llevará adonde yo no sepa; y cuando yo venga y dé las nuevas a Acab, y él no te halle, me matará; y tu siervo teme a Jehová desde su juventud.

2 Reyes 2:16

Y le dijeron: He aquí hay con tus siervos cincuenta varones fuertes; vayan ahora y busquen a tu señor; quizá lo ha levantado el Espíritu de Jehová, y lo ha echado en algún monte o en algún valle. Y él les dijo: No enviéis.

Ezequiel 8:3

Y aquella semejanza extendió la mano, y me tomó por las guedejas de mi cabeza; y el Espíritu me alzó entre el cielo y la tierra, y me llevó en visiones de Dios a Jerusalén, a la entrada de la puerta de adentro que mira hacia el norte, donde estaba la habitación de la imagen del celo, la que hacía celar.

Ezequiel 11:24

Luego me levantó el Espíritu, y me volvió a llevar en visión del Espíritu de Dios a la tierra de los caldeos, a los cautivos. Y se fue de mí la visión que había visto.

Ezequiel 11:1

Y el Espíritu me elevó, y me metió por la puerta oriental de la casa de Jehová, la cual mira hacia el oriente: y he aquí a la entrada de la puerta veinticinco varones, entre los cuales vi a Jaazanías hijo de Azur, y a Pelatías hijo de Benaía, príncipes del pueblo.

Ezequiel 43:5

Y me alzó el Espíritu, y me metió en el atrio de adentro; y he aquí que la gloria de Jehová llenó la casa.

Salmos 119:14

8 Se anticiparon mis ojos a las vigilias de la noche, para meditar en tu palabra.

Salmos 119:111

Por heredad he tomado tus testimonios para siempre; porque son el gozo de mi corazón.

Isaías 35:1-2

Se alegrarán el desierto y la soledad; el yermo se gozará, y florecerá como la rosa.

Isaías 55:12-13

Porque con alegría saldréis, y con paz seréis vueltos; los montes y los collados levantarán canción delante de vosotros, y todos los árboles del campo darán palmadas de aplauso.

Isaías 61:10

En gran manera me gozaré en Jehová, mi alma se alegrará en mi Dios; porque me vistió con ropas de salvación, me rodeó de manto de justicia, como a novio me atavió, y como a novia adornada con sus joyas.

Isaías 66:13-14

Como aquel a quien consuela su madre, así os consolaré yo a vosotros, y en Jerusalén tomaréis consuelo.

Ezequiel 3:12-14

Entonces el Espíritu me levantó, y oí detrás de mí una voz de grande estruendo, que decía: Bendita sea la gloria de Jehová desde su lugar.

Mateo 3:16

Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre Él.

Mateo 13:44

Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo; el cual hallándolo un hombre, lo esconde, y gozoso por ello, va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.

Marcos 1:10

Y luego, subiendo del agua, vio abrirse los cielos, y al Espíritu como paloma que descendía sobre Él.

Hechos 8:8

Y había gran gozo en aquella ciudad.

Hechos 13:52

Y los discípulos estaban llenos de gozo y del Espíritu Santo.

Hechos 16:34

Y llevándolos a su casa, les puso la mesa; y se regocijó de haber creído en Dios con toda su casa.

Romanos 5:2

por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.

Romanos 15:10-13

Y otra vez dice: Regocijaos, gentiles, con su pueblo.

2 Corintios 12:2-4

Conozco a un hombre en Cristo, que hace catorce años (si en el cuerpo, no lo sé; si fuera del cuerpo, no lo sé: Dios lo sabe) fue arrebatado hasta el tercer cielo.

Filipenses 3:3

Porque nosotros somos la circuncisión, los que en espíritu adoramos a Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la carne.

Filipenses 4:4

Regocijaos en el Señor siempre: Otra vez digo: Regocijaos.

Santiago 1:9-10

El hermano que es de humilde condición, regocíjese en su exaltación;

Santiago 4:16

Mas ahora os jactáis en vuestras soberbias. Toda jactancia semejante es mala.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)