Parallel Verses
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Y vio que no había hombre, y abominó que no hubiera quien se interpusiese; y lo salvó su brazo, y le afirmó su misma justicia.
La Biblia de las Américas
Vio que no había nadie, y se asombró de que no hubiera quien intercediera. Entonces su brazo le trajo salvación, y su justicia le sostuvo.
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Y vio que no había hombre, y abominó que no hubiera quien se interpusiera; y lo salvó su brazo, y le afirmó su misma justicia.
Reina Valera 1909
Y vió que no había hombre, y maravillóse que no hubiera quien se interpusiese; y salvólo su brazo, y afirmóle su misma justicia.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Vio que no había nadie, Y se asombró de que no hubiera quien intercediera. Entonces Su brazo Le trajo salvación, Y Su justicia Lo sostuvo.
Spanish: Reina Valera Gómez
Y vio que no había hombre, y se maravilló que no hubiera intercesor; por tanto su propio brazo le trajo salvación, y le afirmó su misma justicia.
New American Standard Bible
And He saw that there was no man, And was astonished that there was no one to intercede; Then His own arm brought salvation to Him, And His righteousness upheld Him.
Artículos
Referencias Cruzadas
Salmos 98:1
Salmo. Cantad al SEÑOR canción nueva, porque ha hecho maravillas; su diestra lo ha salvado, y el brazo de su santidad.
Isaías 52:10
El SEÑOR desnudó el brazo de su santidad ante los ojos de todos los gentiles. Y todos los términos de la tierra verán la salud del Dios nuestro.
Ezequiel 22:30
Y busqué de ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese al portillo delante de mí por la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé.
Génesis 18:23-32
Y se acercó Abraham y dijo: ¿Destruirás también al justo con el impío?
Salmos 106:23
Y trató de destruirlos, a no haberse puesto Moisés su escogido al portillo delante de él, a fin de apartar su ira, para que no los destruyese.
Isaías 41:28
Miré, y no había ninguno; y pregunté de estas cosas, y ningún consejero hubo ; les pregunté, y no respondieron palabra.
Isaías 50:2
porque vine, y nadie apareció; llamé, y nadie respondió. ¿Ha llegado a acortarse mi mano, para no redimir? ¿No hay en mí poder para librar? He aquí que con mi reprensión hago secar el mar; torno los ríos en desierto; hasta pudrirse sus peces, y morirse de sed por falta de agua.
Isaías 63:3-5
Solo pisé el lagar, y de los pueblos nadie fue conmigo. Los pisé con mi ira, y los hollé con mi furor; y su sangre salpicó mis vestidos, y ensucié todas mis ropas.
Isaías 64:7
Y nadie hay que invoque tu nombre, ni que se despierte para tenerte, por lo cual escondiste de nosotros tu rostro, y nos dejaste marchitar en poder de nuestras maldades.
Jeremías 5:1
Discurrid por las plazas de Jerusalén, y mirad ahora, y sabed, y buscad en sus plazas si halláis hombre, si hay alguno que haga juicio, que busque verdad; y yo perdonaré a la ciudad.
Marcos 6:6
Y estaba maravillado de la incredulidad de ellos. Y rodeaba las aldeas de alrededor, enseñando.