Jeremías 24:2

Una cesta tenía higos muy buenos, como brevas; y la otra cesta tenía higos muy malos, que no se podían comer de malos.

Isaías 5:4

¿Qué más se podía hacer a mi viña, que yo no haya hecho en ella? ¿Por qué, esperando yo que diese uvas, ha dado uvas silvestres?

Isaías 5:7

Ciertamente la viña de Jehová de los ejércitos es la casa de Israel, y los hombres de Judá su planta deliciosa. Esperaba juicio, y he aquí vileza; justicia, y he aquí clamor.

Miqueas 7:1

¡Ay de mí! porque he venido a ser como cuando han recogido los frutos del verano, como cuando han rebuscado después de la vendimia, que no queda racimo para comer; mi alma desea los primeros frutos.

Jeremías 24:5-10

Así dice Jehová Dios de Israel: Como a estos buenos higos, así consideraré a los transportados de Judá a los cuales eché de este lugar a tierra de caldeos, para su bien.

Jeremías 29:17

así dice Jehová de los ejércitos: He aquí envío yo contra ellos espada, hambre, y pestilencia, y los pondré como los malos higos, que de malos no se pueden comer.

Ezequiel 15:2-5

Hijo de hombre, ¿qué es el árbol de la vid más que todo árbol? ¿Qué es el sarmiento entre los árboles del bosque?

Oseas 9:10

Como uvas en el desierto hallé a Israel; como la fruta temprana de la higuera en su principio vi a vuestros padres. Ellos entraron a Baal-peor, y se apartaron para vergüenza, y se hicieron abominables como aquello que amaron.

Malaquías 1:12-14

Y vosotros lo habéis profanado cuando decís: Inmunda es la mesa de Jehová; y cuando hablan que su alimento es despreciable.

Mateo 5:13

Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal pierde su sabor, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y ser hollada por los hombres.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)