Job 10:5

¿Son tus días como los días del hombre, o tus años como los tiempos humanos,

Mas, oh amados, no ignoréis una cosa: y es que un día delante del Señor es como mil años y mil años son como un día.

He aquí, Dios es grande, y nosotros no le conocemos; ni se puede rastrear el número de sus años.

Antes que nacieran los montes y formaran la tierra y el mundo, y desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios.

Mas tú, SEÑOR, para siempre permanecerás, y tu memoria de generación y generación.

Dije: Dios mío, no me cortes en el medio de mis días; por generación de generaciones son tus años.

y como un vestido los envolverás, y serán mudados; pero tú eres el mismo, y tus años nunca se acabarán.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido