Job 23:2

Hoy también hablaré con amargura; que es más grave mi llaga que mi gemido.

Mi alma es cortada en mi vida; por tanto soltaré mi queja sobre mí, y hablaré con amargura de mi alma.

¡Oh, si pesaren al justo mi queja y mi tormento, y se alzaren igualmente en balanza!

Por tanto yo no reprimiré mi boca; hablaré con la angustia de mi espíritu, y me quejaré con la amargura de mi alma.

y que te declarara los secretos de la sabiduría! Porque mereces dos tantos según lo establecido; y sabe que Dios te ha olvidado por tu iniquidad.

Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; se volvió mi verdor en sequedades de verano. (Selah.)

Al Señor busqué en el día de mi angustia; mi llaga desangraba de noche y no cesaba; mi alma no quería consuelo.

Zain: Acuérdate de mi aflicción y de mi lloro, del ajenjo y de la hiel.

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