Joel 2:2

día de tinieblas y lobreguez, día nublado y de densa oscuridad. Como la aurora sobre los montes, se extiende un pueblo grande y poderoso; nunca ha habido {nada} semejante a él, ni tampoco lo habrá después por años de muchas generaciones.

Joel 1:6

Porque una nación ha subido contra mi tierra, poderosa e innumerable; sus dientes son dientes de león, y tiene colmillos de leona.

Joel 2:25

Entonces os compensaré por los años que ha comido la langosta, el pulgón, el saltón y la oruga, mi gran ejército, que envié contra vosotros.

Daniel 12:1

En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que vela sobre los hijos de tu pueblo. Será un tiempo de angustia cual nunca hubo desde que existen las naciones hasta entonces; y en ese tiempo tu pueblo será librado, todos los que se encuentren inscritos en el libro.

Joel 2:10-11

Ante ellos tiembla la tierra, se estremecen los cielos, el sol y la luna se oscurecen, y las estrellas pierden su resplandor.

Joel 2:31

El sol se convertirá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día del SEÑOR, grande y terrible.

Éxodo 10:6

``Y llenarán tus casas, las casas de todos tus siervos y las casas de todos los egipcios, {algo} que ni tus padres ni tus abuelos han visto desde el día que vinieron al mundo hasta hoy." Y {Moisés} se volvió y salió de la presencia de Faraón.

Éxodo 10:14

Y subieron las langostas sobre toda la tierra de Egipto y se asentaron en todo el territorio de Egipto; {y eran} muy numerosas. Nunca había habido {tantas} langostas como entonces, ni las habría después.

Éxodo 20:21

Y el pueblo se mantuvo a distancia, mientras Moisés se acercaba a la densa nube donde estaba Dios.

Deuteronomio 32:7

Acuérdate de los días de antaño; considera los años de todas las generaciones. Pregunta a tu padre, y él te lo hará saber; a tus ancianos, y ellos te {lo} dirán.

Salmos 10:6

Dice en su corazón: No hay quien me mueva; por todas las generaciones no sufriré adversidad.

Salmos 97:2

Nubes y densas tinieblas le rodean, justicia y derecho son el fundamento de su trono.

Isaías 5:30

En aquel día gruñirá sobre ella como el bramido del mar. Si se mira hacia la tierra, he aquí, hay tinieblas {y} angustia; aun la luz es oscurecida por sus nubes.

Isaías 8:22

Después mirarán hacia la tierra, y he aquí, tribulación y tinieblas, lobreguez {y} angustia, y {serán} lanzados a la oscuridad.

Jeremías 13:16

Dad gloria al SEÑOR vuestro Dios antes que haga venir las tinieblas, y antes que vuestros pies tropiecen sobre los montes oscuros, y estéis esperando la luz, y El la transforme en profundas tinieblas, {la} torne en lobreguez.

Daniel 9:12

Y El ha confirmado las palabras que habló contra nosotros y contra nuestros jefes que nos gobernaron, trayendo sobre nosotros gran calamidad, pues nunca se ha hecho debajo del cielo {nada} como lo que se ha hecho contra Jerusalén.

Joel 1:2-3

Oíd esto, ancianos, y prestad oído, habitantes todos de la tierra. ¿Ha acontecido cosa semejante en vuestros días, o en los días de vuestros padres?

Joel 2:5

Como estrépito de carros saltan sobre las cumbres de los montes, como el crepitar de llama de fuego que consume la hojarasca, como pueblo poderoso dispuesto para la batalla.

Joel 3:14-15

Multitudes, multitudes en el valle de la decisión. Porque cerca está el día del SEÑOR en el valle de la decisión.

Amós 4:13

Pues he aquí el que forma los montes, crea el viento y declara al hombre cuáles son sus pensamientos, el que del alba hace tinieblas y camina sobre las alturas de la tierra: el SEÑOR, Dios de los ejércitos, es su nombre.

Amós 5:18-20

¿Ay de los que ansían el día del SEÑOR! ¿De qué os servirá el día del SEÑOR? {Será} tinieblas, y no luz;

Sofonías 1:14-15

Cercano está el gran día del SEÑOR, cercano y muy próximo. El clamor del día del SEÑOR es amargo; allí gritará el guerrero.

Marcos 13:19

Porque aquellos días serán {de} tribulación, tal como no ha acontecido desde el principio de la creación que hizo Dios hasta ahora, ni acontecerá jamás.

Hebreos 12:18

Porque no os habéis acercado a {un monte} que se puede tocar, ni a fuego ardiente, ni a tinieblas, ni a oscuridad, ni a torbellino,

Judas 1:13

{son} olas furiosas del mar, que arrojan como espuma su propia vergüenza; estrellas errantes para quienes la oscuridad de las tinieblas ha sido reservada para siempre.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido