Juan 11:32

Y cuando María llegó a donde estaba Jesús, al verle, se postró a sus pies, diciéndole: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.

Juan 11:21

Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.

Lucas 5:8

Al ver esto Simón Pedro, cayó a las rodillas de Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador.

Lucas 8:41

Y he aquí un varón llamado Jairo, que era príncipe de la sinagoga, vino, y postrándose a los pies de Jesús, le rogaba que entrase en su casa;

Lucas 17:16

y se postró sobre su rostro a sus pies, dándole gracias; y éste era samaritano.

Juan 4:49

El oficial del rey le dijo: Señor, desciende antes que mi hijo muera.

Juan 11:37

Y algunos de ellos dijeron: ¿No podía Éste, que abrió los ojos al ciego, hacer también que éste no muriera?

Apocalipsis 5:8

Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero, teniendo cada uno arpas, y tazones de oro llenos de perfumes, que son las oraciones de los santos.

Apocalipsis 5:14

Y los cuatro seres vivientes decían: Amén. Y los veinticuatro ancianos se postraron y adoraron al que vive por siempre jamás.

Apocalipsis 22:8

Y yo Juan vi y oí estas cosas. Y después que las hube oído y visto, me postré para adorar a los pies del ángel que me mostraba estas cosas.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)