Parallel Verses
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Y esta es la voluntad del que me envió, del Padre: Que de todo lo que me diere, no pierda de ello, sino que lo resucite en el día postrero.
La Biblia de las Américas
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Y esta es la voluntad del que me envió, del Padre: Que de todo lo que me diere, no pierda de ello, sino que lo resucite en el día postrero.
Reina Valera 1909
Y esta es la voluntad del que me envió, del Padre: Que todo lo que me diere, no pierda de ello, sino que lo resucite en el día postrero.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Spanish: Reina Valera Gómez
Y ésta es la voluntad del Padre que me envió: Que de todo lo que me ha dado, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero.
New American Standard Bible
"This is the will of Him who sent Me, that of all that He has given Me I lose nothing, but raise it up on the last day.
Artículos
Referencias Cruzadas
Juan 6:40
Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
Juan 6:44
Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero.
Juan 6:54
El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
Juan 17:12
Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu Nombre; a los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición; para que la Escritura se cumpliese.
Juan 18:9
Para que se cumpliese la palabra que había dicho: De los que me diste, ninguno de ellos perdí.
Mateo 18:14
Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños.
Juan 6:37
Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
1 Samuel 25:29
Bien que alguien se haya levantado a perseguirte y a buscar tu alma, con todo, el alma de mi señor será ligada en el haz de los que viven con el SEÑOR Dios tuyo, y él arrojará el alma de tus enemigos como de en medio de la palma de una honda.
Lucas 12:32
No temáis, manada pequeña; porque al Padre ha placido daros el Reino.
Juan 5:28
No os maravilléis de esto; porque vendrá hora, cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz;
Juan 10:27-30
Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen;
Juan 11:24-26
Marta le dice: Yo sé que resucitará en la resurrección en el día postrero.
Juan 12:48
El que me desecha, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.
Romanos 8:11
Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó a Jesús el Cristo de los muertos, vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.
Romanos 8:28-31
Y ya sabemos que a los que a Dios aman, todas las cosas les ayudan a bien, a los que conforme al Propósito son llamados (a ser santos).
Filipenses 3:20-21
Mas nuestra vivienda es en los cielos; de donde también esperamos el Salvador, al Señor Jesús, el Cristo;
Colosenses 3:3-4
Porque muertos sois, y vuestra vida está escondida con el Cristo en Dios.
2 Tesalonicenses 2:13-14
Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios por vosotros, hermanos amados del Señor, de que Dios os haya escogido por primicias de salud, por la santificación del Espíritu y la fe en la verdad;
2 Timoteo 2:19
Pero el fundamento de Dios está firme, el cual tiene este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo.
1 Pedro 1:5
para vosotros que sois guardados en la virtud de Dios por fe, para alcanzar la salud que está aparejada para ser manifestada en el postrer tiempo.
Judas 1:1
Judas, siervo de Jesús, el Cristo, y hermano de Jacobo, a los llamados, santificados en Dios Padre, y conservados en Jesús, el Cristo:
Información sobre el Versículo
Lecturas contextuales
38 Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió. 39 Y esta es la voluntad del que me envió, del Padre: Que de todo lo que me diere, no pierda de ello, sino que lo resucite en el día postrero. 40 Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.