Lamentaciones 2:7

El Señor desechó su altar, menospreció su santuario, ha entregado en mano del enemigo los muros de sus palacios; han dado gritos en la casa de Jehová como en día de fiesta.

Salmos 74:3-8

Levanta tus pies a los asolamientos eternos; a toda la maldad que el enemigo ha hecho en el santuario.

Salmos 78:59-61

Lo oyó Dios, y se enojó, y en gran manera aborreció a Israel.

Jeremías 52:13

Y quemó la casa de Jehová, y la casa del rey, y todas las casas de Jerusalén; y le prendió fuego a todo grande edificio.

Ezequiel 7:20-22

En cuanto a la belleza de su ornamento, Él la puso en majestad; pero ellos hicieron de ella las imágenes de sus detestables ídolos; por eso se lo torné en cosa repugnante.

Ezequiel 24:21

Di a la casa de Israel: Así dice Jehová el Señor: He aquí yo profano mi santuario, la gloria de vuestra fortaleza, el deseo de vuestros ojos, y el deleite de vuestra alma; vuestros hijos y vuestras hijas que dejasteis caerán a espada.

Levítico 26:31

Y tornaré vuestras ciudades en ruinas, y asolaré vuestros santuarios, y no oleré la fragancia de vuestro suave perfume.

Levítico 26:44

Y aun con todo esto, estando ellos en tierra de sus enemigos, yo no los desecharé, ni los abominaré para consumirlos, invalidando mi pacto con ellos: porque yo Jehová soy su Dios:

2 Crónicas 36:19

Y quemaron la casa de Dios, y rompieron el muro de Jerusalén, y consumieron al fuego todos sus palacios, y destruyeron todos sus vasos preciosos.

Salmos 72:4-20

Juzgará a los afligidos del pueblo, salvará los hijos del menesteroso, y quebrantará al violento.

Isaías 64:10-11

Tus santas ciudades están desiertas, Sión es un desierto, Jerusalén una soledad.

Jeremías 7:12-14

Ahora pues, id a mi lugar en Silo, donde hice que morase mi nombre al principio, y ved lo que le hice por la maldad de mi pueblo Israel.

Jeremías 26:6

Yo pondré esta casa como Silo, y daré esta ciudad en maldición a todas las gentes de la tierra.

Jeremías 26:18

Miqueas el morastita profetizó en tiempo de Ezequías rey de Judá, diciendo: Así dice Jehová de los ejércitos: Sión será arada como un campo, y Jerusalén vendrá a ser montones, y el monte del templo en cumbres de bosque.

Jeremías 32:29

Y vendrán los caldeos que combaten contra esta ciudad, y le prenderán fuego, y la quemarán, asimismo las casas sobre cuyas azoteas ofrecieron incienso a Baal y derramaron libaciones a dioses ajenos, para provocarme a ira.

Jeremías 33:3-5

Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y difíciles que tú no conoces.

Jeremías 39:8

Y los caldeos prendieron fuego a la casa del rey y a las casas del pueblo, y derribaron los muros de Jerusalén.

Lamentaciones 2:1

¡Cómo oscureció el Señor en su furor a la hija de Sión! Derribó del cielo a la tierra la hermosura de Israel, y no se acordó del estrado de sus pies en el día de su ira.

Lamentaciones 2:5

El Señor fue como un enemigo, devoró a Israel; destruyó todos sus palacios, demolió sus fortalezas; y multiplicó en la hija de Judá la tristeza y el lamento.

Ezequiel 7:24

Traeré, por tanto, a los más malos de las naciones, los cuales poseerán sus casas; y haré cesar la soberbia de los poderosos, y sus santuarios serán profanados.

Amós 2:5

Meteré por tanto fuego en Judá, el cual consumirá los palacios de Jerusalén.

Miqueas 3:12

Por tanto, a causa de vosotros Sión será arada como un campo, y Jerusalén vendrá a ser un montón de ruinas, y el monte de la casa como las cumbres del bosque.

Mateo 24:2

Y Jesús les dijo: ¿No veis todo esto? De cierto os digo: No quedará piedra sobre piedra, que no sea derribada.

Hechos 6:13-14

Y pusieron testigos falsos, que decían: Este hombre no cesa de hablar palabras blasfemas en contra de este lugar santo y de la ley:

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)