Parallel Verses
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él diciendo: Defiéndeme de mi adversario.
La Biblia de las Américas
Reina Valera 1909
Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía á él diciendo: Hazme justicia de mi adversario.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él diciendo: Defiéndeme de mi adversario.
Spanish: Reina Valera Gómez
Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él diciendo: Hazme justicia de mi adversario.
New American Standard Bible
"There was a widow in that city, and she kept coming to him, saying, 'Give me legal protection from my opponent.'
Referencias Cruzadas
Isaías 1:17
aprended a hacer el bien. Buscad juicio. Restituid al agraviado. Oíd en derecho al huérfano. Amparad a la viuda.
Deuteronomio 27:19
Maldito el que torciere el derecho del extranjero, del huérfano, y de la viuda. Y dirá todo el pueblo: Amén.
2 Samuel 14:5-24
Y el rey dijo: ¿Qué tienes? Y ella respondió: Yo soy una mujer viuda y mi marido ha muerto.
Job 22:9
A las viudas enviaste vacías, y los brazos de los huérfanos fueron quebrados.
Job 29:13
La bendición del que se iba a perder venía sobre mí; y al corazón de la viuda daba alegría.
Isaías 1:21-23
¿Cómo te has convertido en ramera, oh ciudad fiel? Llena estuvo de juicio, en ella habitó la equidad; mas ahora, los homicidas.
Jeremías 5:28
Engordaron y se pusieron lustrosos, y aún sobrepujaron hechos de maldad; no juzgaron la causa, la causa del huérfano; con todo se hicieron prósperos, y la causa de los pobres no juzgaron.
Lucas 18:7-8
¿Y Dios no vengará a sus escogidos, que claman a él día y noche, aunque sea longánime acerca de ellos?
Romanos 13:3-4
Porque los magistrados no son para temor al que bien hace, sino al malo. ¿Quieres pues no temer la potestad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella;
Información sobre el Versículo
Lecturas contextuales
2 diciendo: Había un juez en una ciudad, el cual ni temía a Dios, ni respetaba a hombre. 3 Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él diciendo: Defiéndeme de mi adversario. 4 Pero él no quiso por algún tiempo; pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a Dios, ni tengo respeto a hombre,