Lucas 23:43

Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo, que hoy estarás conmigo en el paraíso.

Apocalipsis 2:7

El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias. Al que venciere, daré á comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios.

2 Corintios 5:8

Mas confiamos, y más quisiéramos partir del cuerpo, y estar presentes al Señor.

Filipenses 1:23

Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de ser desatado, y estar con Cristo, lo cual es mucho mejor:

Job 33:27-30

El mira sobre los hombres; y el que dijere: Pequé, y pervertí lo recto, Y no me ha aprovechado;

Salmos 50:15

E invócame en el día de la angustia: Te libraré, y tú me honrarás.

Isaías 1:18-19

Venid luego, dirá Jehová, y estemos á cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos: si fueren rojos como el carmesí, vendrán á ser como blanca lana.

Isaías 53:11

Del trabajo de su alma verá y será saciado; con su conocimiento justificará mi siervo justo á muchos, y él llevará las iniquidades de ellos.

Isaías 55:6-9

Buscad á Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano.

Isaías 65:24

Y será que antes que clamen, responderé yo; aun estando ellos hablando, yo habré oído.

Miqueas 7:18

¿Qué Dios como tú, que perdonas la maldad, y olvidas el pecado del resto de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque es amador de misericordia.

Mateo 20:15-16

¿No me es lícito á mi hacer lo que quiero con lo mío? ó ¿es malo tu ojo, porque yo soy bueno?

Lucas 15:4-5

¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si perdiere una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va á la que se perdió, hasta que la halle?

Lucas 15:20-24

Y levantándose, vino á su padre. Y como aun estuviese lejos, viólo su padre, y fué movido á misericordia, y corrió, y echóse sobre su cuello, y besóle.

Lucas 19:10

Porque el Hijo del hombre vino á buscar y á salvar lo que se había perdido.

Juan 14:3

Y si me fuere, y os aparejare lugar, vendré otra vez, y os tomaré á mí mismo: para que donde yo estoy, vosotros también estéis.

Juan 17:24

Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, ellos estén también conmigo; para que vean mi gloria que me has dado: por cuanto me has amado desde antes de la constitución del mundo.

Romanos 5:20-21

La ley empero entró para que el pecado creciese; mas cuando el pecado creció, sobrepujó la gracia;

2 Corintios 12:3-4

Y conozco tal hombre, (si en el cuerpo, ó fuera del cuerpo, no lo sé: Dios lo sabe,)

1 Timoteo 1:15-16

Palabra fiel y digna de ser recibida de todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar á los pecadores, de los cuales yo soy el primero.

Hebreos 7:25

Por lo cual puede también salvar eternamente á los que por él se allegan á Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.

Salmos 32:5

Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Confesaré, dije, contra mí mis rebeliones á Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. (Selah.)

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