Marcos 1:11

Y vino una voz del cielo que decía: Tú eres mi Hijo amado, en ti tengo contentamiento.

Isaías 42:1

He aquí mi siervo, yo le sostendré; mi escogido en quien mi alma tiene contentamiento. He puesto sobre Él mi Espíritu, Él traerá juicio a las naciones.

Salmos 2:7

Yo publicaré el decreto: Jehová me ha dicho: Mi Hijo eres tú; yo te engendré hoy.

Mateo 3:17

Y he aquí una voz del cielo que decía: Éste es mi Hijo amado, en quien tengo contentamiento.

Marcos 9:7

Y vino una nube que les cubrió de sombra, y desde la nube una voz que decía: Éste es mi Hijo amado; a Él oíd.

Juan 3:16

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Romanos 1:4

y que fue declarado ser el Hijo de Dios con poder, según el Espíritu de santidad, por la resurrección de entre los muertos,

Colosenses 1:13

el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo;

2 Pedro 1:17-18

Porque Él recibió de Dios Padre honor y gloria, cuando le fue enviada desde la magnífica gloria una gran voz que decía: Éste es mi Hijo amado, en el cual tengo contentamiento.

Mateo 17:5

Mientras Él aún hablaba, una nube resplandeciente los cubrió; y he aquí una voz desde la nube, que decía: Éste es mi Hijo amado, en quien tengo contentamiento; a Él oíd.

Lucas 9:35

Y vino una voz desde la nube, que decía: Éste es mi Hijo amado; a Él oíd.

Juan 1:34

Y yo le vi, y he dado testimonio de que Éste es el Hijo de Dios.

Juan 3:35-36

El Padre ama al Hijo y todas las cosas ha dado en su mano.

Juan 5:20-23

Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que Él hace; y mayores obras que éstas le mostrará, de manera que vosotros os maravilléis.

Juan 5:37

Y el Padre mismo que me envió da testimonio de mí. Vosotros nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su parecer,

Juan 6:69

Y nosotros creemos, y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.

Juan 12:28-30

Padre, glorifica tu nombre. Entonces vino una voz del cielo, que decía: Lo he glorificado, y lo glorificaré otra vez.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)