Mateo 17:7

Entonces Jesús vino y los tocó, y dijo: Levantaos, y no temáis.

Daniel 8:18

Y mientras él hablaba conmigo, caí dormido en tierra sobre mi rostro; y él me tocó, y me hizo estar en pie.

Daniel 10:10

Y he aquí una mano me tocó, e hizo que me pusiese sobre mis rodillas y sobre las palmas de mis manos.

Daniel 10:18

Y aquella como semejanza de hombre me tocó otra vez, y me fortaleció;

Mateo 14:27

Pero enseguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!

Daniel 9:21

y todavía estaba yo hablando en oración, cuando aquel varón Gabriel, al cual había visto en visión al principio, volando con presteza, me tocó como a la hora del sacrificio de la tarde.

Lucas 24:5

y como tuvieron temor, y bajaron el rostro a tierra, ellos les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive?

Hechos 9:6

Y él, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer.

Apocalipsis 1:17

Y cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y Él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último;

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)