Nehemías 6:9

Porque todos ellos nos intimidaban, diciendo: Se debilitarán las manos de ellos en la obra, y no será hecha. Ahora, pues, oh Dios, fortalece mis manos.

Salmos 138:3

En el día que clamé, me respondiste; me fortaleciste con fortaleza en mi alma.

1 Samuel 30:6

Y David fue muy angustiado, porque el pueblo hablaba de apedrearlo; porque todo el pueblo estaba con ánimo amargo, cada uno por sus hijos y por sus hijas. Pero David se fortaleció en Jehová su Dios.

2 Crónicas 15:7

Pero esforzaos vosotros, y no desfallezcan vuestras manos; que recompensa hay para vuestra obra.

2 Crónicas 32:18

Y gritaron a gran voz en judaico al pueblo de Jerusalén que estaba en los muros, para espantarles y atemorizarles, para tomar la ciudad.

Esdras 4:1-24

Y cuando los enemigos de Judá y de Benjamín oyeron que los hijos de los de la cautividad edificaban el templo de Jehová Dios de Israel,

Nehemías 4:10-14

Y dijo Judá: Las fuerzas de los acarreadores se han debilitado, y el escombro es mucho, y no podemos edificar el muro.

Nehemías 6:14

Acuérdate, Dios mío, de Tobías y de Sanbalat, conforme a estas sus obras, y también de Noadías profetisa, y de los otros profetas que trataban de intimidarme.

Salmos 56:3

En el día que temo, yo en ti confío.

Salmos 68:35

Terrible eres, oh Dios, desde tus santuarios: El Dios de Israel, Él da fortaleza y vigor a su pueblo. Bendito Dios.

Salmos 71:1

En ti, oh Jehová, he esperado; no sea yo avergonzado jamás.

Isaías 35:3-4

Fortaleced las manos cansadas, corroborad las rodillas endebles.

Isaías 41:10

No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.

Jeremías 38:4

Y dijeron los príncipes al rey: Te pedimos que sea muerto este hombre; porque de esta manera hace desmayar las manos de los hombres de guerra que han quedado en esta ciudad, y las manos de todo el pueblo, hablándoles tales palabras; porque este hombre no busca la paz de este pueblo, sino el mal.

Zacarías 10:12

Y yo los fortaleceré en Jehová, y caminarán en su nombre, dice Jehová.

2 Corintios 12:9

y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que habite en mí el poder de Cristo.

Efesios 3:16

para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu;

Efesios 6:10

Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fortaleza.

Filipenses 4:13

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Hebreos 12:12

Por lo cual alzad las manos caídas y las rodillas paralizadas;

1 Pedro 5:10

Y el Dios de toda gracia, que nos ha llamado a su gloria eterna por Cristo Jesús, después que hubiereis padecido un poco de tiempo, Él mismo os perfeccione, afirme, corrobore y establezca.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)