Oseas 13:9
Te perdiste, oh Israel, mas en mí está tu ayuda.
Deuteronomio 33:26
No hay como el Dios de Jeshurun, Montado sobre los cielos para tu ayuda, Y sobre las nubes con su grandeza.
Jeremías 2:17
¿No te acarreó esto tu dejar á Jehová tu Dios, cuando te hacía andar por camino?
Jeremías 2:19
Tu maldad te castigará, y tu apartamiento te condenará: sabe pues y ve cuán malo y amargo es tu dejar á Jehová tu Dios, y faltar mi temor en tí, dice el Señor Jehová de los ejércitos.
Deuteronomio 33:29
Bienaventurado tú, oh Israel, ¿Quién como tú, Pueblo salvo por Jehová, Escudo de tu socorro, Y espada de tu excelencia? Así que tus enemigos serán humillados, Y tú hollarás sobre sus alturas.
2 Reyes 17:7-17
Porque como los hijos de Israel pecasen contra Jehová su Dios, que los sacó de tierra de Egipto de bajo la mano de Faraón rey de Egipto, y temiesen á dioses ajenos,
Salmos 33:20
Nuestra alma esperó á Jehová; Nuestra ayuda y nuestro escudo es él.
Salmos 46:1
Al Músico principal: de los hijos de Coré: Salmo sobre Alamoth. DIOS es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.
Salmos 121:1-2
Cántico gradual. ALZARÉ mis ojos á los montes, De donde vendrá mi socorro.
Salmos 146:5
Bienaventurado aquel en cuya ayuda es el Dios de Jacob, Cuya esperanza es en Jehová su Dios:
Proverbios 6:32
Mas el que comete adulterio con la mujer, es falto de entendimiento: Corrompe su alma el que tal hace.
Proverbios 8:36
Mas el que peca contra mí, defrauda su alma: Todos los que me aborrecen, aman la muerte.
Isaías 3:9
La apariencia del rostro de ellos los convence: que como Sodoma predican su pecado, no lo disimulan. Ay del alma de ellos! porque allegaron mal para sí.
Isaías 3:11
Ay del impío! mal le irá: porque según las obras de sus manos le será pagado.
Jeremías 4:18
Tu camino y tus obras te hicieron esto, ésta tu maldad: por lo cual amargura penetrará hasta tu corazón.
Jeremías 5:25
Vuestras iniquidades han estorbado estas cosas; y vuestros pecados apartaron de vosotros el bien.
Oseas 13:4
Mas yo soy Jehová tu Dios desde la tierra de Egipto: no conocerás pues Dios fuera de mí, ni otro Salvador sino á mí.
Oseas 14:1
CONVIÉRTETE, oh Israel, á Jehová tu Dios: porque por tu pecado has caído.
Malaquías 1:9
Ahora pues, orad á la faz de Dios que tenga piedad de nosotros: esto de vuestra mano vino: ¿le seréis agradables? dice Jehová de los ejércitos.
Efesios 1:3-5
Bendito el Dios y Padre del Señor nuestro Jesucristo, el cual nos bendijo con toda bendición espiritual en lugares celestiales en Cristo:
Tito 3:3-7
Porque también éramos nosotros necios en otro tiempo, rebeldes, extraviados, sirviendo á concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y en envidia, aborrecibles, aborreciendo los unos á los otros.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido