Proverbios 1:19
Tales son las sendas de todo el que codicia la ganancia, la cual prenderá la vida de sus poseedores.
Proverbios 15:27
Alborota su casa el codicioso; mas el que aborrece las dádivas vivirá.
2 Samuel 18:11-13
Y Joab respondió al hombre que le daba la nueva: Y viéndolo tú, ¿por qué no le heriste luego allí echándole a tierra? Y sobre mí, que te hubiera dado diez siclos de plata, y un talabarte.
2 Reyes 5:20-27
Giezi, el criado de Eliseo varón de Dios, dijo entre sí: He aquí mi señor estorbó a este sirio, Naamán, no tomando de su mano las cosas que había traído. Vive el SEÑOR, que correré yo tras él, y tomaré de él alguna cosa.
Job 31:39
si comí su sustancia sin dinero, o afligí el alma de sus dueños;
Proverbios 23:3-4
No codicies sus manjares, porque es pan engañoso.
Eclesiastés 5:13
Hay otra enfermedad maligna que he visto debajo del sol: las riquezas guardadas por sus dueños para su mal;
Jeremías 22:17-19
Mas tus ojos y tu corazón no son sino a tu avaricia, y a derramar la sangre inocente, y a opresión, y a hacer agravio.
Miqueas 2:1-3
¡Ay de los que piensan iniquidad, y de los que fabrican el mal en sus camas! Cuando viene la mañana lo ponen en obra, porque tienen en su mano el poder.
Miqueas 3:10-12
que edificáis a Sion con sangre, y a Jerusalén con injusticia;
Habacuc 2:9
¡Ay del que codicia ganancia mal habida por violencia para su casa, por poner en alto su nido, por escaparse del poder del mal!
Hechos 8:19-20
diciendo: Dadme también a mí esta potestad, que a cualquiera que pusiere las manos encima, reciba el Espíritu Santo.
1 Timoteo 3:3
no dado al vino, no heridor, no codicioso de ganancias deshonestas, sino moderado, no litigioso, ajeno de avaricia;
1 Timoteo 6:9-10
Porque los que quieren enriquecerse, caen en tentación y en lazo, y en muchas codicias locas y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición.
Santiago 5:1-4
Ea, ya ahora, oh ricos, llorad aullando por vuestras miserias que os vendrán.
2 Pedro 2:3
y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas, sobre los cuales la condenación ya de largo tiempo no se tarda, y su perdición no se duerme.
2 Pedro 2:14-16
teniendo los ojos llenos de adulterio, y no saben cesar de pecar; cebando las almas inconstantes; teniendo el corazón ejercitado en codicias, siendo hijos de maldición;
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido