Romanos 6:2
En ninguna manera. Porque los que somos muertos al pecado, ¿cómo viviremos aún en él?
Colosenses 3:3
Porque muertos sois, y vuestra vida está escondida con el Cristo en Dios.
1 Pedro 2:24
él mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos a los pecados, vivamos a la justicia, por cuya herida habéis sido sanados.
Romanos 7:4
Así también vosotros, hermanos míos, sois muertos a la ley en el cuerpo del Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de los muertos, para que fructifiquemos a Dios.
Gálatas 2:19
Porque yo por la ley soy muerto a la ley, para vivir a Dios.
Génesis 39:9
No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer, ¿cómo, pues, haría yo este grande mal y pecaría contra Dios?
Salmos 119:104
De tus mandamientos he adquirido entendimiento; por tanto he aborrecido todo camino de mentira.
Romanos 3:1-4
¿Qué, pues, tiene más el Judío? ¿O qué aprovecha la circuncisión?
Romanos 5:11
Y no sólo esto, más aún nos gloriamos en Dios por el Señor nuestro Jesús el Cristo, por el cual ahora hemos recibido la reconciliación.
Romanos 6:5-11
Porque si fuimos plantados juntamente en él a la semejanza de su muerte, también lo seremos a la de su resurrección;
Romanos 7:6
Pero ahora somos libres de la ley de la muerte en la cual estábamos detenidos, para que sirvamos en novedad de Espíritu, y no en vejez de letra.
2 Corintios 5:14-17
Porque la caridad del Cristo nos constriñe, porque juzgamos así: Que si uno fue muerto por todos, luego todos son muertos;
Gálatas 6:14
Mas lejos esté de mí gloriarme, sino en el madero del Señor nuestro Jesús, el Cristo, por quien el mundo me es muerto a mí, y yo al mundo.
Colosenses 2:20
Pues si sois muertos con el Cristo a los elementos del mundo, ¿por qué como si vivieseis al mundo, decretáis ritos:
1 Pedro 1:14
como hijos obedientes, no conformándoos con los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia;
1 Pedro 4:1-3
Pues que el Cristo ha padecido por nosotros en la carne, vosotros también estad armados del mismo pensamiento; que el que ha padecido en la carne, cesó de pecado;
1 Juan 3:9
Cualquiera que es nacido de Dios, no hace pecado, porque su simiente está en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido