Romanos 7:5

Porque cuando estábamos en la carne, la influencia del pecado, que era por la ley, obraba en nuestros miembros llevando fruto para muerte;

Romanos 6:13

ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad; sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia.

Romanos 6:21

¿Qué fruto teníais entonces en aquellas cosas de las que ahora os avergonzáis? Porque el fin de ellas es muerte.

Mateo 15:19

Porque del corazón salen los malos pensamientos, homicidios, adulterios, fornicaciones, hurtos, falsos testimonios, blasfemias.

Juan 3:6

Lo que es nacido de la carne, carne es, y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.

Romanos 1:26

Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza;

Romanos 3:20

Por tanto, por las obras de la ley ninguna carne será justificada delante de Él; pues por la ley es el conocimiento del pecado.

Romanos 4:15

Porque la ley produce ira; pero donde no hay ley, tampoco hay transgresión.

Romanos 5:20

Y la ley entró para que el pecado abundase; pero cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia;

Romanos 6:19

Hablo humanamente, por causa de la debilidad de vuestra carne; que así como presentasteis vuestros miembros como siervos a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora presentéis vuestros miembros como siervos a la justicia y a la santidad.

Romanos 6:23

Porque la paga del pecado es muerte; mas el don de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

Romanos 7:7-13

¿Qué diremos entonces? ¿Es pecado la ley? ¡En ninguna manera! Al contrario, yo no hubiera conocido el pecado a no ser por la ley: Porque no conociera la codicia si la ley no dijera: No codiciarás.

Romanos 7:23

mas veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros.

Romanos 8:8-9

Así que, los que están en la carne no pueden agradar a Dios.

1 Corintios 15:56

El aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado es la ley.

2 Corintios 3:6-9

el cual también nos ha hecho ministros suficientes del nuevo testamento; no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.

Gálatas 3:10

Porque todos los que son de las obras de la ley están bajo maldición. Porque escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas que están escritas en el libro de la ley, para hacerlas.

Gálatas 5:16-17

Digo, pues: Andad en el Espíritu; y no satisfagáis la concupiscencia de la carne.

Gálatas 5:19-21

Y manifiestas son las obras de la carne, que son: Adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,

Gálatas 5:24

Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y concupiscencias.

Efesios 2:3

entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo; en la concupiscencia de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.

Efesios 2:11

Por tanto, acordaos que en otro tiempo vosotros, los gentiles en la carne, erais llamados incircuncisión por la que es llamada circuncisión hecha por mano en la carne;

Colosenses 3:5

Haced morir, pues, vuestros miembros que están en la tierra; fornicación, impureza, pasiones desordenadas, mala concupiscencia y avaricia, que es idolatría;

Tito 3:3

Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y diversos placeres, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, aborreciéndonos unos a otros.

Santiago 1:15

Y la concupiscencia, cuando ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, engendra muerte.

Santiago 2:9-10

pero si hacéis acepción de personas, cometéis pecado, y sois convictos por la ley como transgresores.

Santiago 4:1

¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras concupiscencias, las cuales combaten en vuestros miembros?

1 Juan 3:4

Cualquiera que comete pecado, traspasa también la ley; pues el pecado es transgresión de la ley.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)