Salmos 104:21

Los leoncillos rugen tras la presa, y buscan de Dios su comida.

Job 38:39

¿Cazarás tú la presa para el león? ¿Y saciarás el hambre de los leoncillos,

Joel 1:20

Las bestias del campo braman también a ti; porque se secaron los arroyos de las aguas, y fuego consumió las praderías del desierto.

Job 38:41

¿Quién prepara al cuervo su alimento, cuando sus polluelos claman a Dios, bullendo de un lado a otro por falta de comida?

Salmos 34:10

Los leoncillos necesitan, y tienen hambre; pero los que buscan a Jehová, no tendrán falta de ningún bien.

Salmos 145:15

Los ojos de todos esperan en ti, y tú les das su comida a su tiempo.

Salmos 147:9

Él da a la bestia su mantenimiento, y a los hijos de los cuervos que claman.

Isaías 31:4

Porque Jehová me dijo a mí de esta manera: Como el león y el cachorro del león ruge sobre su presa, y si se reúne contra él cuadrilla de pastores, no se espantará de sus voces, ni se acobardará por el tropel de ellos; así Jehová de los ejércitos descenderá a pelear por el monte de Sión, y por su collado.

Ezequiel 19:2-14

Y dirás: ¡Cómo se echó entre los leones tu madre la leona! entre los leoncillos crió sus cachorros.

Joel 1:18

¡Cómo gimieron las bestias! ¡Cuán turbados anduvieron los hatos de los bueyes, porque no tuvieron pastos! también fueron asolados los rebaños de las ovejas.

Joel 2:22

Animales del campo, no temáis; porque los pastos del desierto reverdecerán, porque los árboles llevarán su fruto, la higuera y la vid darán sus frutos.

Amós 3:4

¿Rugirá el león en la selva sin haber presa? ¿Dará el leoncillo su rugido desde su guarida, sin haber apresado algo?

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)