Salmos 119:117

Sostenme, y seré salvo; y me deleitaré siempre en tus estatutos.

Salmos 119:6

Entonces no sería yo avergonzado, cuando mirara en todos tus mandamientos.

Salmos 17:5

Sustenta mis pasos en tus caminos, para que mis pies no resbalen.

Salmos 71:6

Por ti he sido sustentado desde el vientre; de las entrañas de mi madre tú fuiste el que me sacó; de ti ha sido siempre mi alabanza.

Salmos 73:23

Con todo, yo siempre estuve contigo; trabaste de mi mano derecha.

Salmos 119:48

Alzaré asimismo mis manos a tus mandamientos que amé; y meditaré en tus estatutos.

Salmos 119:111-112

Por heredad he tomado tus testimonios para siempre; porque son el gozo de mi corazón.

Salmos 139:10

aun allí me guiará tu mano, y me asirá tu diestra.

Isaías 41:13

Porque yo, el SEÑOR, soy tu Dios, que te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudaré.

Romanos 14:4

¿Tú quién eres que juzgas al siervo ajeno? Por su señor está en pie, o cae; y si cae se afirmará; que poderoso es el Señor para afirmarle.

Judas 1:24

A aquel, pues, que es poderoso para guardaros sin pecado, y presentaros delante de su gloria irreprensibles, con grande alegría,

Juan 10:28-29

y yo les doy vida eterna y no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano.

1 Pedro 1:5

para vosotros que sois guardados en la virtud de Dios por fe, para alcanzar la salud que está aparejada para ser manifestada en el postrer tiempo.

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