Salmos 119:8

Tus estatutos guardaré; no me dejes enteramente.

Josué 24:15

Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.

Salmos 38:21-22

No me desampares, oh Jehová: Dios mío, no te alejes de mí.

Salmos 51:11

No me eches de delante de ti; y no quites de mí tu Santo Espíritu.

Salmos 71:9

No me deseches en el tiempo de la vejez; cuando mi fuerza se acabare, no me desampares.

Salmos 71:18

Y aun hasta la vejez y las canas; oh Dios, no me desampares, hasta que muestre tu fortaleza a esta generación, y tu poder a todos los que han de venir.

Salmos 119:16

Me deleitaré en tus estatutos; no me olvidaré de tus palabras.

Salmos 119:106

Juré y ratifiqué que he de guardar tus justos juicios.

Salmos 119:115-117

Apartaos de mí, malignos; pues yo guardaré los mandamientos de mi Dios.

Salmos 119:176

Yo anduve errante como oveja extraviada; busca a tu siervo; porque no me he olvidado de tus mandamientos.

Filipenses 4:13

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)