Salmos 35:22
Tú lo has visto, oh SEÑOR; no calles: Señor, de mí no te alejes.
Éxodo 3:7
Y dijo el SEÑOR: Bien he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he oído su clamor a causa de sus exactores; por lo cual yo he entendido sus dolores.
Salmos 10:1
¿Por qué estás lejos, oh SEÑOR, y te escondes en los tiempos de la angustia?
Salmos 28:1
De David. A ti llamaré, oh SEÑOR, fuerza mía; no te desentiendas de mí; para que no sea yo , dejándome tú , semejante a los que descienden al sepulcro.
Salmos 22:11
No te alejes de mí, porque la angustia está cerca; porque no hay quien ayude.
Salmos 38:21
No me desampares, oh SEÑOR; Dios mío, no te alejes de mí.
Salmos 71:12
Oh Dios, no te alejes de mí; Dios mío, acude pronto a mi socorro.
Salmos 22:19
Mas tú, SEÑOR, no te alejes; fortaleza mía, apresúrate para mi ayuda.
Salmos 39:12
Oye mi oración, oh SEÑOR, y escucha mi clamor; no calles ante mis lágrimas; porque peregrino soy contigo, y advenedizo, como todos mis padres.
Salmos 50:21
Estas cosas hiciste, y yo he callado; pensabas por eso que de cierto sería yo como tú; yo te argüiré, y las pondré delante de tus ojos.
Salmos 83:1
Canción: Salmo de Asaf. Oh Dios, no guardes silencio; no calles, oh Dios, ni te estés quieto.
Isaías 65:6
He aquí, que escrito está delante de mí; no callaré, antes daré, y pagaré en su seno.
Hechos 7:34
He visto, he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he oído el gemido de ellos, y he descendido para librarlos. Ahora pues, ven, te enviaré a Egipto.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido