Salmos 37:8

Deja la ira, y depón el enojo; no te excites en manera alguna a hacer lo malo.

Efesios 4:31

Toda amargura, y enojo, e ira, y gritería, y maledicencia, y toda malicia, sea quitada de entre vosotros;

Proverbios 14:29

El que tarda en airarse, es grande de entendimiento; mas el impaciente de espíritu enaltece la necedad.

Proverbios 16:32

Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; y el que domina su espíritu, que el que toma una ciudad.

Efesios 4:26

Airaos, pero no pequéis: No se ponga el sol sobre vuestro enojo;

Job 5:2

Es cierto que al necio lo mata la ira, y al codicioso lo consume la envidia.

Colosenses 3:8

Mas ahora dejad también vosotros todas estas cosas; ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras sucias de vuestra boca.

Santiago 1:19-20

Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea presto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;

1 Samuel 25:21-23

Y David había dicho: Ciertamente en vano he guardado todo lo que éste tiene en el desierto, sin que nada le haya faltado de todo cuanto es suyo; y él me ha vuelto mal por bien.

Job 18:4

Oh tú, que te despedazas con tu furor, ¿Será abandonada la tierra por tu causa, y serán traspasadas de su lugar las peñas?

Salmos 31:22

Y decía yo en mi premura: Cortado soy de delante de tus ojos; mas tú oíste la voz de mis súplicas, cuando a ti clamé.

Salmos 73:15

Si yo hubiera dicho: Así hablaré; he aquí, habría traicionado la generación de tus hijos:

Salmos 116:11

Y dije en mi apresuramiento: Todo hombre es mentiroso.

Jeremías 20:14-15

Maldito el día en que nací; el día en que mi madre me dio a luz no sea bendito.

Jonás 4:1

Pero esto desagradó a Jonás en gran manera, y se enojó.

Jonás 4:9

Entonces dijo Dios a Jonás: ¿Tanto te enojas por la calabacera? Y él respondió: Mucho me enojo, hasta la muerte.

Lucas 9:54-55

Y viendo esto sus discípulos Jacobo y Juan, dijeron: Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo, y los consuma, así como hizo Elías?

Santiago 3:14-18

Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis, ni seáis mentirosos contra la verdad.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)