Salmos 6:4

Vuélvete, oh Jehová, libra mi alma; sálvame por tu misericordia.

Salmos 17:13

Levántate, oh Jehová; sal a su encuentro, póstrale; libra mi alma del malo con tu espada;

Salmos 22:20

Libra de la espada mi alma; del poder del perro mi vida.

Salmos 25:7

De los pecados de mi juventud, y de mis rebeliones, no te acuerdes; conforme a tu misericordia acuérdate de mí, por tu bondad, oh Jehová.

Salmos 69:13

Mas yo a ti elevo mi oración, oh Jehová, en tiempo aceptable; oh Dios, por la multitud de tu misericordia, por la verdad de tu salvación, escúchame.

Salmos 79:8-9

No recuerdes contra nosotros las iniquidades antiguas: Anticípennos presto tus misericordias, porque estamos muy abatidos.

Salmos 80:14

Oh Dios de los ejércitos, vuelve ahora: Mira desde el cielo, y considera, y visita esta viña,

Salmos 86:13

Porque tu misericordia es grande para conmigo; y has librado mi alma del más profundo infierno.

Salmos 90:13

Vuélvete, oh Jehová: ¿hasta cuándo? Y aplácate para con tus siervos.

Salmos 116:4

Entonces invoqué el nombre de Jehová, diciendo: Te ruego, oh Jehová, libra mi alma.

Salmos 116:8

Pues tú has librado mi alma de la muerte, mis ojos de lágrimas, y mis pies de resbalar.

Salmos 120:2

Libra mi alma, oh Jehová, de labio mentiroso, de la lengua engañosa.

Salmos 121:7

Jehová te guardará de todo mal; Él guardará tu alma.

Isaías 38:17

He aquí amargura grande me sobrevino en la paz; pero por amor a mi alma tú la libraste del hoyo de corrupción; porque echaste tras tus espaldas todos mis pecados.

Daniel 9:18

Inclina, oh Dios mío, tu oído, y oye; abre tus ojos, y mira nuestros asolamientos, y la ciudad sobre la cual es llamado tu nombre: porque no derramamos nuestros ruegos ante tu presencia confiados en nuestras justicias, sino en tus muchas misericordias.

Malaquías 3:7

Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis leyes, y no las guardasteis. Volveos a mí, y yo me volveré a vosotros, dice Jehová de los ejércitos. Mas dijisteis: ¿En qué nos hemos de volver?

Efesios 1:6

para alabanza de la gloria de su gracia, en la cual nos hizo aceptos en el Amado,

Efesios 2:7-8

para mostrar en las edades venideras las abundantes riquezas de su gracia, en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)