Salmos 64:2

Escóndeme del secreto consejo de los malignos; De la conspiración de los que obran iniquidad:

Salmos 56:6

Reúnense, escóndense, Miran ellos atentamente mis pasos, Esperando mi vida.

Génesis 4:6

Entonces Jehová dijo á Caín: ¿Por qué te has ensañado, y por qué se ha inmutado tu rostro?

1 Samuel 23:22-23

Id pues ahora, apercibid aún, considerad y ved su lugar donde tiene el pie, y quién lo haya visto allí; porque se me ha dicho que él es en gran manera astuto.

2 Samuel 17:2-4

Y daré sobre él cuando él estará cansado y flaco de manos: lo atemorizaré, y todo el pueblo que está con él huirá, y heriré al rey solo.

Salmos 2:2

Estarán los reyes de la tierra, Y príncipes consultarán unidos Contra Jehová, y contra su ungido, diciendo:

Salmos 3:1

Salmo de David, cuando huía de adelante de Absalom su hijo. OH Jehová, cuánto se han multiplicado mis enemigos! Muchos se levantan contra mí.

Salmos 27:5

Porque él me esconderá en su tabernáculo en el día del mal; Ocultaráme en lo reservado de su pabellón; Pondráme en alto sobre una roca.

Salmos 31:20

Los esconderás en el secreto de tu rostro de las arrogancias del hombre: Los pondrás en un tabernáculo á cubierto de contención de lenguas.

Salmos 59:2

Líbrame de los que obran iniquidad, Y sálvame de hombres sanguinarios.

Salmos 109:2-3

Porque boca de impío y boca de engañador se han abierto sobre mí: Han hablado de mí con lengua mentirosa,

Salmos 143:9

Líbrame de mis enemigos, oh Jehová: A ti me acojo.

Isaías 32:2

Y será aquel varón como escondedero contra el viento, y como acogida contra el turbión; como arroyos de aguas en tierra de sequedad, como sombra de gran peñasco en tierra calurosa.

Y yo como cordero inocente que llevan á degollar, pues no entendía que maquinaban contra mí designios, diciendo: Destruyamos el árbol con su fruto, y cortémoslo de la tierra de los vivientes, y no haya más memoria de su nombre.

Jeremías 18:23

Mas tú, oh Jehová, conoces todo su consejo contra mí para muerte; no perdones su maldad, ni borres su pecado de delante de tu rostro: y tropiecen delante de ti; haz así con ellos en el tiempo de tu furor.

Mateo 26:3-4

Entonces los príncipes de los sacerdotes, y los escribas, y los ancianos del pueblo se juntaron al patio del pontífice, el cual se llamaba Caifás;

Lucas 23:18-23

Mas toda la multitud dió voces á una, diciendo: Quita á éste, y suéltanos á Barrabás:

Hechos 23:14-15

Los cuales se fueron á los príncipes de los sacerdotes y á los ancianos, y dijeron: Nosotros hemos hecho voto debajo de maldición, que no hemos de gustar nada hasta que hayamos muerto á Pablo.

Hechos 25:3

Pidiendo gracia contra él, que le hiciese traer á Jerusalem, poniendo ellos asechanzas para matarle en el camino.

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