Sofonías 3:7

Diciendo: Ciertamente ahora me temerás; recibirás castigo, y no será derribada su habitación, todo lo cual yo visité sobre ella; mas ellos se levantaron de mañana y corrompieron todas sus obras.

Oseas 9:9

Llegaron a lo profundo, se corrompieron, como en los días de Gabaa; ahora se acordará de su iniquidad; visitará su pecado.

Jeremías 7:7

Os haré morar en este lugar, en la tierra que di a vuestros padres para siempre.

Jeremías 36:3

Si por ventura oyere la Casa de Judá todo el mal que yo pienso hacerles, para que se torne cada uno de su mal camino, y yo perdonaré su iniquidad y su pecado.

Sofonías 3:2

No escuchó la voz, ni recibió la disciplina; no se confió en el SEÑOR, no se acercó a su Dios.

Génesis 6:12

Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba corrompida; porque toda carne había corrompido su camino sobre la tierra.

Deuteronomio 4:16

para que no os corrompáis, y hagáis para vosotros escultura, imagen de alguna semejanza, figura de macho o de hembra;

2 Crónicas 28:6-8

Porque Peca, hijo de Remalías mató en Judá en un día ciento veinte mil, todos hombres valientes; por cuanto habían dejado al SEÑOR Dios de sus padres.

2 Crónicas 32:1-2

Después de estas cosas y de esta fidelidad, vino Senaquerib rey de los asirios, entró en Judá, y asentó campamento contra las ciudades fuertes, y determinó entrar en ellas.

2 Crónicas 33:11

por lo cual el SEÑOR trajo contra ellos los príncipes del ejército del rey de los asirios, los cuales aprisionaron con grillos de bronce a Manasés, y lo llevaron a Babilonia.

2 Crónicas 36:3-10

Y el rey de Egipto lo quitó de Jerusalén, y condenó la tierra en cien talentos de plata y uno de oro.

Isaías 5:4

¿Qué más se había de hacer a mi viña, que yo no hice en ella? ¿Cómo, esperando yo que diera uvas, ha dado uvas silvestres?

Isaías 63:8

Porque dijo: Ciertamente mi pueblo son, hijos que no mienten; y fue su Salvador.

Jeremías 8:6

Escuché y oí; no hablan derecho, no hay hombre que se arrepienta de su mal, diciendo: ¿Qué he hecho? Cada cual se volvió a su carrera, como caballo que arremete con ímpetu a la batalla.

Jeremías 17:25-27

Entrarán por las puertas de esta ciudad, los reyes y los príncipes, que se sientan sobre el trono de David, en carros y en caballos, ellos y sus príncipes, los varones de Judá, y los moradores de Jerusalén; y esta ciudad será habitada para siempre.

Jeremías 25:5

cuando decían: Volveos ahora de vuestro mal camino y de la maldad de vuestras obras, y morad sobre la tierra que os dio el SEÑOR, a vosotros y a vuestros padres para siempre;

Jeremías 38:17

Entonces dijo Jeremías a Sedequías: Así dijo el SEÑOR Dios de los ejércitos, Dios de Israel: Si salieres luego a los príncipes del rey de Babilonia, tu alma vivirá, y esta ciudad no será puesta a fuego; y vivirás tú y tu casa;

Miqueas 2:1-2

¡Ay de los que piensan iniquidad, y de los que fabrican el mal en sus camas! Cuando viene la mañana lo ponen en obra, porque tienen en su mano el poder.

Lucas 19:42-44

diciendo: ¡Oh si también tú conocieras, a lo menos en este tu día, lo que toca a tu paz! Mas ahora está encubierto a tus ojos.

2 Pedro 3:9

El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; pero es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno se pierda, sino que todos procedan al arrepentimiento.

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