56 casos

'La palabra' en la Biblia

a quien vino la palabra del SEÑOR en los días de Josías, hijo de Amón, rey de Judá, en el año trece de su reinado.

También vino {a él la palabra} en los días de Joacim, hijo de Josías, rey de Judá, hasta el fin del año once de Sedequías, hijo de Josías, rey de Judá, {o sea,} hasta el destierro de Jerusalén en el mes quinto.

Y vino a mí la palabra del SEÑOR:

Vino entonces a mí la palabra del SEÑOR: `` ¿Qué ves tú, Jeremías?" ``Veo una vara de almendro," respondí.

Por segunda vez vino a mí la palabra del SEÑOR: `` ¿Qué ves tú?" ``Veo una olla hirviendo que se vuelca desde el norte," respondí.

Y vino a mí la palabra del SEÑOR:

Oigan la palabra del SEÑOR, casa de Jacob, y todas las familias de la casa de Israel.

¡Oh generación, atiendan a la palabra del SEÑOR! ¿He sido Yo un desierto para Israel, O una tierra de densa oscuridad? ¿Por qué dice Mi pueblo: `Vaguemos {libremente;} No vendremos más a Ti'?

Los profetas son {como} el viento, Y la palabra no está en ellos. Que así se les haga a ellos."

¿A quiénes hablaré y advertiré, para que oigan? Sus oídos están cerrados, Y no pueden escuchar. La palabra del SEÑOR les es oprobio; No se deleitan en ella.

``Párate a la puerta de la casa del SEÑOR y proclama allí esta palabra, y di: `Oigan la palabra del SEÑOR, todos los de Judá, los que entran por estas puertas para adorar al SEÑOR.'"

Oigan, pues, mujeres, la palabra del SEÑOR, Y reciba el oído de ustedes la palabra de Su boca; Enseñen la lamentación a sus hijas Y la endecha cada una a su vecina.

Oigan la palabra que el SEÑOR les habla, oh casa de Israel.

{Esta} es la palabra que vino a Jeremías de parte del SEÑOR:

Compré, pues, el cinturón conforme a la palabra del SEÑOR, y me lo puse en la cintura.

Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR por segunda vez:

Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR:

Entonces la palabra del SEÑOR vino a mí, y me dijo:

y diles: `Escuchen la palabra del SEÑOR, reyes de Judá, todo Judá y todos los habitantes de Jerusalén que entran por estas puertas:

Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR:

Entonces dijeron: ``Vengan y tramemos planes contra Jeremías. Ciertamente la ley no le faltará al sacerdote, ni el consejo al sabio, ni la palabra al profeta. Vengan, vamos a herirlo con la lengua, y no hagamos caso a ninguna de sus palabras."

``Dirás: `Oigan la palabra del SEÑOR, reyes de Judá y habitantes de Jerusalén. Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: ``Voy a traer tal calamidad sobre este lugar, que a todo el que oiga de ella le zumbarán los oídos.

Porque cada vez que hablo, grito; Proclamo: ¡Violencia, destrucción! Pues la palabra del SEÑOR ha venido a ser para mí Oprobio y escarnio cada día.

``Entonces {dile} a la casa del rey de Judá: `Oigan la palabra del SEÑOR,

`Escucha la palabra del SEÑOR, oh rey de Judá, que te sientas sobre el trono de David, tú, tus siervos y tu pueblo que entran por estas puertas.

"Y no se acordarán más del oráculo (la profecía) del SEÑOR, porque la palabra de cada uno le será por oráculo, pues han pervertido las palabras del Dios viviente, del SEÑOR de los ejércitos, nuestro Dios.

Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR:

``Desde el año trece de Josías, hijo de Amón, rey de Judá, hasta hoy, en estos veintitrés años ha venido a mí la palabra del SEÑOR, y les he hablado repetidas veces, pero no han escuchado.

"Pero si ellos son profetas, y si la palabra del SEÑOR está con ellos, que supliquen ahora al SEÑOR de los ejércitos para que los utensilios que quedan en la casa del SEÑOR, en la casa del rey de Judá y en Jerusalén, no sean llevados a Babilonia.

"Si un profeta profetiza paz, cuando la palabra del profeta se cumpla, ese profeta será conocido {como} el que el SEÑOR en verdad ha enviado."

Después que Hananías había roto el yugo del cuello del profeta Jeremías, vino a Jeremías la palabra del SEÑOR:

``Oigan, pues, la palabra del SEÑOR, todos ustedes los desterrados, a quienes he enviado de Jerusalén a Babilonia."

Entonces vino a Jeremías la palabra del SEÑOR:

Oigan, naciones, la palabra del SEÑOR, Anuncien en las costas lejanas, Y digan: ``El que dispersó a Israel lo reunirá, Y lo guardará como un pastor a su rebaño."

Entonces Jeremías dijo: ``Vino a mí la palabra del SEÑOR y me dijo:

"Y Hanamel, hijo de mi tío, vino a verme al patio de la guardia conforme a la palabra del SEÑOR, y me dijo: `Te ruego que compres el campo que tengo en Anatot, que está en la tierra de Benjamín, porque tú tienes el derecho de posesión y el rescate es tuyo; cómpralo para ti.' Entonces supe que ésta era la palabra del SEÑOR.

Entonces vino la palabra del SEÑOR a Jeremías por segunda vez, mientras él estaba aún detenido en el patio de la guardia:

La palabra que vino a Jeremías de parte del SEÑOR, cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, y todo su ejército y todos los reinos de la tierra que estaban bajo su dominio y todos los pueblos, peleaban contra Jerusalén y contra todas sus ciudades:

"Sin embargo oye la palabra del SEÑOR, oh Sedequías, rey de Judá. Así dice el SEÑOR acerca de ti: `No morirás a espada;

en paz morirás. Como quemaron {especias} por tus padres, los reyes anteriores que te precedieron, así quemarán {especias} por ti, y {con} `` ¡Ay, señor!" harán lamento por ti.' Porque Yo he hablado la palabra," declara el SEÑOR.

Entonces vino la palabra del SEÑOR a Jeremías, diciendo:

Entonces vino la palabra del SEÑOR a Jeremías, después que el rey había quemado el rollo y las palabras que Baruc había escrito al dictado de Jeremías:

Entonces vino la palabra del SEÑOR al profeta Jeremías:

"Pero si sigue usted rehusando pasarse, ésta es la palabra que el SEÑOR me ha mostrado:

La palabra del SEÑOR había venido a Jeremías mientras estaba detenido en el patio de la guardia, diciéndole:

La palabra que vino a Jeremías de parte del SEÑOR después que Nabuzaradán, capitán de la guardia, lo había dejado libre en Ramá, cuando lo había tomado estando él encadenado entre todos los desterrados de Jerusalén y Judá que iban deportados a Babilonia.

Después de diez días, vino la palabra del SEÑOR a Jeremías.

en este caso, oigan la palabra del SEÑOR, remanente de Judá. Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: ``Si se obstinan en entrar en Egipto, y entran para residir allí,

Entonces vino la palabra del SEÑOR a Jeremías en Tafnes:

La palabra que vino a Jeremías para todos los Judíos que moraban en la tierra de Egipto, los que moraban en Migdol, en Tafnes, en Menfis y en la tierra de Patros:

Entonces Jeremías dijo a todo el pueblo y a todas las mujeres: ``Oigan la palabra del SEÑOR, todo Judá, los que están en la tierra de Egipto:

"Pero oigan la palabra del SEÑOR, todo Judá, los que habitan en la tierra de Egipto: `He jurado por Mi gran nombre,' dice el SEÑOR, `que nunca más será invocado Mi nombre en toda la tierra de Egipto por boca de ningún hombre de Judá, diciendo: ``Vive el Señor DIOS."

La palabra que el SEÑOR habló acerca de Babilonia, la tierra de los Caldeos, por medio del profeta Jeremías:

Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia de los Hispanos © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, http://www.lockman.org. Usadas con permiso