58 Versículo de la Biblia sobre Alas
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y toda fiera según su especie, y todo ganado según su especie, y todo reptil que se arrastra sobre la tierra según su especie, y toda ave según su especie, toda clase de aves.
``La henderá después por las alas, sin dividir{la}; y el sacerdote la quemará en el altar, sobre la leña que está en el fuego; es holocausto, una ofrenda encendida de aroma agradable para el SEÑOR.
Baten alegres las alas del avestruz, ¿acaso con el ala y plumaje del amoreña}>>?
¿Ay de la tierra del zumbido de alas que está más allá de los ríos de Etiopía,
``Además, éstas abominaréis de entre las aves, no se comerán, son abominación: el águila, el buitre y el buitre negro, el milano y el halcón según su especie; todo cuervo según su especie;Leer más.
el avestruz, la lechuza, la gaviota y el gavilán según su especie; el búho, el somormujo, el búho real, la lechuza blanca, el pelícano, el buitre común, la cigüeña, la garza según su especie; la abubilla y el murciélago. ``Todo insecto alado que ande sobre cuatro {patas} os será abominación. ``Sin embargo, éstos podéis comer de entre todos los insectos alados que andan sobre cuatro {patas:} los que tienen, además de sus patas, piernas con coyunturas para saltar con ellas sobre la tierra. ``De ellos podéis comer éstos: la langosta según sus especies, la langosta destructora según sus especies, el grillo según sus especies y el saltamontes según sus especies. ``Pero todos los demás insectos alados que tengan cuatro patas os {serán} abominación. ``Por estos {animales,} pues, seréis inmundos; todo el que toque sus cadáveres quedará inmundo hasta el atardecer, y todo el que levante parte de sus cadáveres lavará sus vestidos y quedará inmundo hasta el atardecer.
Toda ave limpia podréis comer. Pero éstas no comeréis: el águila, el buitre y el buitre negro; el azor, el halcón y el milano según su especie;Leer más.
todo cuervo según su especie; el avestruz, la lechuza, la gaviota y el gavilán según su especie; el búho, el búho real, la lechuza blanca, el pelícano, el buitre, el somormujo, la cigüeña y la garza según su especie; la abubilla y el murciélago. Todo insecto alado será inmundo para vosotros; no se comerá.
había en él toda {clase de} cuadrúpedos y reptiles de la tierra, y aves del cielo. Y oyó una voz: Levántate, Pedro, mata y come. Mas Pedro dijo: De ninguna manera, Señor, porque yo jamás he comido nada impuro o inmundo.Leer más.
De nuevo, por segunda vez, {llegó} a él una voz: Lo que Dios ha limpiado, no {lo} llames tú impuro.
Y los querubines tendrán extendidas las alas hacia arriba, cubriendo el propiciatorio con sus alas, uno frente al otro; los rostros de los querubines estarán {vueltos} hacia el propiciatorio.
Y los querubines tenían extendidas las alas hacia arriba, cubriendo el propiciatorio con sus alas, uno frente al otro; los rostros de los querubines estaban {vueltos} hacia el propiciatorio.
Entonces los sacerdotes trajeron el arca del pacto del SEÑOR a su lugar, al santuario interior de la casa, al lugar santísimo, bajo las alas de los querubines. Porque los querubines extendían las alas sobre el lugar del arca, y los querubines cubrían el arca y sus barras por encima.
Los sacerdotes trajeron el arca del pacto del SEÑOR a su lugar, al santuario interior de la casa, al lugar santísimo, bajo las alas de los querubines. Porque los querubines extendían las alas sobre el lugar del arca, y los querubines cubrían el arca y sus barras por encima.
y oro acrisolado por peso para el altar del incienso; y oro para el diseño del carro, {es decir,} de los querubines, que extendían {sus alas} y cubrían el arca del pacto del SEÑOR.
Y las alas de los dos querubines medían veinte codos; el ala de uno, de cinco codos, tocaba la pared de la casa, y {su} otra ala, de cinco codos, tocaba el ala del otro querubín. Y el ala del otro querubín, de cinco codos, tocaba la pared de la casa; y {su} otra ala, de cinco codos, se unía al ala del primer querubín. Las alas de estos querubines se extendían veinte codos; estaban de pie, con sus rostros {vueltos} hacia el salón {principal.}
En su centro {había} figuras semejantes a cuatro seres vivientes. Y este era su aspecto: tenían forma humana. Tenía cada uno cuatro caras, y cuatro alas cada uno de ellos. Sus piernas eran rectas, y la planta de sus pies era como la planta de la pezuña del ternero, y brillaban como bronce bruñido.Leer más.
Bajo sus alas, a sus cuatro lados, {tenían} manos humanas. En cuanto a las caras y a las alas de los cuatro, sus alas se tocaban una a la otra y {sus caras} no se volvían cuando andaban; cada uno iba de frente hacia adelante. Y la forma de sus caras {era como} la cara de un hombre; los cuatro tenían cara de león a la derecha y cara de toro a la izquierda, y los cuatro tenían cara de águila; {así eran} sus caras. Sus alas se extendían por encima; con dos se tocaban uno a otro y con dos cubrían su cuerpo. Y cada uno iba de frente hacia adelante; adondequiera que iba el espíritu, iban ellos, sin volverse cuando andaban. En medio de los seres vivientes había algo que parecía carbones encendidos en llamas, como antorchas que se lanzaban de un lado a otro entre los seres vivientes. El fuego resplandecía, y del fuego salían rayos. Y los seres vivientes corrían de un lado a otro como el fulgor del relámpago. Miré a los seres vivientes, y he aquí, había una rueda en la tierra junto a {cada uno de} los seres vivientes de cuatro caras. El aspecto de las ruedas y su hechura {era} como el brillo del crisólito, y las cuatro tenían la misma forma; su aspecto y su hechura {eran} como si una rueda estuviera dentro de la {otra} rueda. Cuando andaban, se movían en las cuatro direcciones, sin volverse cuando andaban. Sus aros eran altos e imponentes, y los aros de las cuatro estaban llenos de ojos alrededor. Y cuando los seres vivientes andaban, las ruedas se movían con ellos. Y cuando los seres vivientes se levantaban de la tierra, las ruedas {también} se levantaban. Y adondequiera que iba el espíritu, iban ellos en esa dirección. Y las ruedas se levantaban juntamente con ellos; porque el espíritu de los seres vivientes {estaba} en las ruedas. Cuando ellos andaban, andaban ellas, y cuando ellos se detenían, se detenían ellas. Y cuando ellos se levantaban de la tierra, las ruedas se levantaban juntamente con ellos, porque el espíritu de los seres vivientes {estaba} en las ruedas. Sobre las cabezas de los seres vivientes {había} algo semejante a un firmamento con el brillo deslumbrante de un cristal, extendido por encima de sus cabezas. Y debajo del firmamento sus alas {se extendían} derechas, la una hacia la otra; cada uno tenía dos que cubrían sus cuerpos por un lado y por el otro. Y oí el ruido de sus alas cuando andaban, como el estruendo de muchas aguas, como la voz del Todopoderoso, un ruido de tumulto como el ruido de un campamento militar; cuando se detenían, bajaban sus alas. También hubo un ruido por encima del firmamento que {había} sobre sus cabezas; cuando se detenían, bajaban sus alas.
{Oí} el ruido de las alas de los seres vivientes que se tocaban una a la otra, y el ruido de las ruedas junto a ellos, un gran ruido atronador.
El ruido de las alas de los querubines se oía hasta el atrio exterior, como la voz del Dios Todopoderoso cuando habla. Y sucedió que cuando ordenó al hombre vestido de lino, diciendo: Toma fuego de entre las ruedas, de entre los querubines, él entró y se paró junto a una rueda. El querubín extendió su mano de entre los querubines hacia el fuego que {estaba} entre ellos, {lo} tomó y {lo} puso en las manos del que estaba vestido de lino, el cual {lo} tomó y salió.Leer más.
Y los querubines parecían tener la forma de la mano de un hombre debajo de sus alas. Entonces miré, y he aquí, {había} cuatro ruedas junto a los querubines, cada rueda junto a cada querubín; el aspecto de las ruedas {era} como el brillo de una piedra de Tarsis. En cuanto a su apariencia, las cuatro tenían la misma semejanza, como si una rueda estuviera dentro de la {otra} rueda. Cuando andaban, se movían en las cuatro direcciones, sin volverse cuando andaban, sino que seguían la dirección en que ponían el rostro, sin volverse cuando andaban. Y todo su cuerpo, sus espaldas, sus manos, sus alas y las ruedas estaban llenos de ojos alrededor, las ruedas de los cuatro. A las ruedas se les llamó torbellino, y yo lo oí. Y tenía cada uno cuatro caras. La primera cara {era} la cara de un querubín, la segunda, la cara de un hombre, la tercera, la cara de un león y la cuarta, la cara de un águila. Entonces los querubines se levantaron. Estos eran los seres vivientes que yo había visto en el río Quebar. Cuando los querubines andaban, las ruedas andaban a su lado; y cuando los querubines alzaban sus alas para elevarse del suelo, las ruedas no se apartaban de su lado. Cuando los querubines se detenían, se detenían {las ruedas,} y cuando se levantaban, se levantaban {las ruedas} con ellos, porque el espíritu de los seres vivientes {estaba} en ellas. Y la gloria del SEÑOR salió de sobre el umbral del templo y se puso sobre los querubines. Cuando los querubines alzaron sus alas y se elevaron del suelo ante mis ojos salieron con las ruedas a su lado, y se detuvieron a la entrada de la puerta oriental de la casa del SEÑOR. Y la gloria del Dios de Israel estaba por encima, sobre ellos. Estos eran los seres vivientes que yo había visto debajo del Dios de Israel junto al río Quebar; entonces supe que eran querubines. Cada uno tenía cuatro caras y cada uno cuatro alas, y {había} una semejanza de manos de hombre debajo de sus alas. En cuanto a la forma de sus caras, eran las mismas caras cuya apariencia yo había visto junto al río Quebar. Cada uno caminaba derecho hacia adelante.
Por encima de El había serafines; cada uno tenía seis alas: con dos cubrían sus rostros, con dos cubrían sus pies y con dos volaban.
Entonces voló hacia mí uno de los serafines con un carbón encendido en su mano, que había tomado del altar con las tenazas;
Y los cuatro seres vivientes, cada uno de ellos con seis alas, estaban llenos de ojos alrededor y por dentro, y día y noche no cesaban de decir: SANTO, SANTO, SANTO, {es} EL SEÑOR DIOS, EL TODOPODEROSO, el que era, el que es y el que ha de venir.
Como un águila que despierta su nidada, que revolotea sobre sus polluelos, extendió sus alas y los tomó, los llevó sobre su plumaje.
Allí la serpiente anidará y pondrá {sus huevos,} {los} incubará y juntará {su cría} bajo su sombra; también allí se juntarán los halcones, cada uno con su compañera.
¿Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que son enviados a ella! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus pollitos debajo de sus alas, y no quisiste!
¿Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que le son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina a sus pollitos debajo de sus alas, y no quisiste!
Con sus plumas te cubre, y bajo sus alas hallas refugio; escudo y baluarte es su fidelidad.
``Vosotros habéis visto lo que he hecho a los egipcios, y {cómo} os he tomado sobre alas de águilas y os he traído a mí.
Que el SEÑOR recompense tu obra y que tu remuneración sea completa de parte del SEÑOR, Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte.
Guárdame como a la niña de tus ojos; escóndeme a la sombra de tus alas
¿Cuán preciosa es, oh Dios, tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se refugian a la sombra de tus alas.
Para el director del coro; {según tonada de} No destruyas. Mictam de David, en la cueva, cuando huía de Saúl.Ten piedad de mí, oh Dios, ten piedad de mí, porque en ti se refugia mi alma; en la sombra de tus alas me ampararé hasta que la destrucción pase.
Que more yo en tu tienda para siempre; {y} me abrigue en el refugio de tus alas. (Selah)
Porque tú has sido mi socorro, y a la sombra de tus alas canto gozoso.
Como aves que vuelan, así protegerá el SEÑOR de los ejércitos a Jerusalén; {la} protegerá y {la} librará, {la} perdonará y {la} rescatará.
`Pero había otra gran águila de grandes alas y abundante plumaje, y he aquí, esta vid dobló sus raíces hacia ella, y hacia ella extendió sus sarmientos desde los surcos donde estaba plantada para que la regara.
El SEÑOR levantará contra ti una nación de lejos, desde el extremo de la tierra, {que} descenderá rauda como águila, una nación cuya lengua no entenderás,
por tanto, he aquí, el Señor va a traer sobre ellos las aguas impetuosas y abundantes del Eufrates, {es decir,} al rey de Asiria con toda su gloria, que se saldrá de todos sus cauces y pasará sobre todas sus riberas. Fluirá con ímpetu en Judá, inundará y seguirá adelante, hasta el cuello llegará, y la extensión de sus alas llenará la anchura de tu tierra, oh Emmanuel.
Y dirás: ``Así dice el Señor DIOS: `Una gran águila de grandes alas, largos piñones y espeso plumaje de muchos colores, vino al Líbano y se llevó la cima del cedro; arrancó el más alto de sus renuevos, lo llevó a una tierra de mercaderes y lo puso en una ciudad de comerciantes.
{Pon la} trompeta a tu boca. Como un águila {viene el enemigo} contra la casa del SEÑOR, porque han transgredido mi pacto, y se han rebelado contra mi ley.
Sus caballos son más veloces que leopardos y más astutos que lobos al anochecer. Al galope {vienen} sus jinetes, sus jinetes vienen de lejos, vuelan como águila que se precipita a devorar.
Luego alcé los ojos y miré, y he aquí dos mujeres salían con el viento en sus alas; y tenían alas como alas de cigüeña, y alzaron el efa entre la tierra y el cielo.
Porque así dice el SEÑOR: He aquí, como águila volará veloz, y extenderá sus alas contra Moab.
He aquí, se remonta, vuela veloz como un águila y extiende sus alas contra Bosra. En aquel día el corazón de los valientes de Edom será como el corazón de una mujer de parto.
También tenían corazas como corazas de hierro; y el ruido de sus alas era como el estruendo de carros, de muchos caballos que se lanzan a la batalla.
Cabalgó sobre un querubín, y voló; y apareció sobre las alas del viento.
Cabalgó sobre un querubín, y voló; y raudo voló sobre las alas del viento.
{El es} el que pone las vigas de sus altos aposentos en las aguas; el que hace de las nubes su carroza; el que anda sobre las alas del viento;
pero los que esperan en el SEÑOR renovarán sus fuerzas; se remontarán {con} alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán.
Cuando os acostáis en los apriscos, {sois como} alas de paloma cubiertas de plata, y sus plumas de oro resplandeciente.
Alcanzó mi mano las riquezas de los pueblos como a un nido; como se recogen los huevos abandonados, yo junté toda la tierra, y no hubo quien aleteara ni abriera el pico ni gorgojeara.
Y dije: ¡Quién me diera alas como de paloma! Volaría y hallaría reposo.
Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila a fin de que volara de la presencia de la serpiente al desierto, a su lugar, donde fue* sustentada por un tiempo, tiempos y medio tiempo.
Cuando pones tus ojos en ella, ya no está. Porque {la riqueza} ciertamente se hace alas, como águila que vuela {hacia} los cielos.
Después de esto seguí mirando, y he aquí, otra más, semejante a un leopardo que tenía sobre su dorso cuatro alas de ave; la bestia tenía cuatro cabezas, y le fue dado dominio.
La primera {era} como un león y tenía alas de águila. Mientras yo miraba, sus alas le fueron arrancadas, fue levantada del suelo y puesta sobre dos pies, como un hombre, y le fue dado corazón de hombre.
{Si} tomo las alas del alba, {y si} habito en lo más remoto del mar,
Mas para vosotros que teméis mi nombre, se levantará el sol de justicia con la salud en sus alas; y saldréis y saltaréis como terneros del establo.
Tópicos sobre Alas
Las alas de Dios
Salmos 91:4Con sus plumas te cubre, y bajo sus alas hallas refugio; escudo y baluarte es su fidelidad.
Las alas de las aves
Salmos 91:4Con sus plumas te cubre, y bajo sus alas hallas refugio; escudo y baluarte es su fidelidad.
Las alas del ángel
Éxodo 25:20Y los querubines tendrán extendidas las alas hacia arriba, cubriendo el propiciatorio con sus alas, uno frente al otro; los rostros de los querubines estarán {vueltos} hacia el propiciatorio.