26 Versículo de la Biblia sobre Deseo de muerte
Versículos Más Relevantes
En aquellos días los hombres buscarán la muerte y no la hallarán; y ansiarán morir, y la muerte huirá de ellos.
`` ¿Por qué, pues, me sacaste de la matriz? ¿Ojalá que hubiera muerto y nadie me hubiera visto!
Maldito el día en que nací; el día en que me dio a luz mi madre no sea bendito. Maldito el hombre que dio la noticia a mi padre, diciendo: ¿Te ha nacido un hijo varón!, haciéndolo muy feliz. Sea ese hombre como las ciudades que el SEÑOR destruyó sin piedad; oiga gritos de mañana y alaridos al mediodía,Leer más.
porque no me mató en el vientre para que mi madre hubiera sido mi sepultura, y su vientre embarazado para siempre. ¿Por qué salí del vientre para ver pena y aflicción, y que acaben en vergüenza mis días?
Entonces él me dijo: ``Te ruego que te pongas junto a mí y me mates, pues la agonía se ha apoderado de mí, porque todavía estoy con vida."
¿Oh, si me escondieras en el Seol, si me ocultaras hasta que tu ira se pasara, si me pusieras un plazo y de mí te acordaras!
El anduvo por el desierto un día de camino, y vino y se sentó bajo un enebro; pidió morirse y dijo: Basta ya, SEÑOR, toma mi vida porque yo no soy mejor que mis padres.
Y ahora, oh SEÑOR, te ruego que me quites la vida, porque mejor me es la muerte que la vida.
Y sucedió que al salir el sol, dispuso Dios un sofocante viento solano, y el sol hirió la cabeza de Jonás y él desfallecía, y deseaba con {toda} su alma morir, diciendo: Mejor me es la muerte que la vida.
Entonces comenzarán A DECIR A LOS MONTES: ``CAED SOBRE NOSOTROS"; Y A LOS COLLADOS: ``CUBRIDNOS."
Y escogerá la muerte en lugar de la vida todo el remanente que quede de este linaje malvado, los que queden en todos los lugares adonde los he arrojado --declara el SEÑOR de los ejércitos.
a los que ansían la muerte, pero no llega, y cavan por ella más que por tesoros;
Y felicité a los muertos, los que ya murieron, más que a los vivos, los que aún viven.
Y los hijos de Israel les decían: Ojalá hubiéramos muerto a manos del SEÑOR en la tierra de Egipto cuando nos sentábamos junto a las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta saciarnos; pues nos habéis traído a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud.
Y murmuraron contra Moisés y Aarón todos los hijos de Israel; y les dijo toda la congregación: ¡Ojalá hubiéramos muerto en la tierra de Egipto! ¡Ojalá hubiéramos muerto en este desierto!
El pueblo contendió con Moisés y {le} habló, diciendo: ¡Ojalá hubiéramos perecido cuando nuestros hermanos murieron delante del SEÑOR!
Y el rey se conmovió profundamente, y subió al aposento {que había} encima de la puerta y lloró. Y decía así mientras caminaba: ¡Hijo mío Absalón; hijo mío, hijo mío Absalón! ¡Quién me diera haber muerto yo en tu lugar! ¡Absalón, hijo mío, hijo mío!
que se alegran sobremanera, {y} se regocijan cuando encuentran el sepulcro?
Pero los ojos de los malvados languidecerán, y no habrá escape para ellos; su esperanza es dar su último suspiro.
También serán destruidos los lugares altos de Avén, el pecado de Israel; espinos y abrojos crecerán sobre sus altares. Entonces dirán a los montes: ¿Cubridnos!, y a los collados: ¡Caed sobre nosotros!
Aunque caven hasta el Seol, de allí los tomará mi mano; y aunque suban al cielo, de allí los haré bajar.
Mis enemigos hablan mal contra mí, {diciendo:} ¿Cuándo morirá y perecerá su nombre?
Porque mis enemigos han hablado de mí; y los que acechan mi vida han consultado entre sí,
al amar a aquellos que te odian y al odiar a aquellos que te aman. Pues hoy has demostrado que príncipes y siervos no son nada para ti; porque ahora en este día sé que si Absalón estuviera vivo y todos nosotros hoy estuviéramos muertos, entonces tú estarías complacido.