31 Versículo de la Biblia sobre dormir en paz
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En paz me acostaré, y asimismo dormiré; porque sólo tú, Jehová, me haces estar confiado.
Cuando te acuestes, no tendrás temor; sino que te acostarás, y será dulce tu sueño.
Y mi pueblo habitará en morada de paz, y en habitaciones seguras, y en recreos de reposo.
Por demás es que os levantéis de madrugada, y vayáis tarde a reposar, y que comáis pan de dolores; pues que a su amado dará Dios el sueño.
Porque no duermen ellos, si no han hecho mal, y pierden su sueño, si no han hecho caer a alguno.
Dulce es el sueño del trabajador, ya sea que coma mucho o poco; mas al rico no le deja dormir la abundancia.
Y yo daré paz en la tierra, y dormiréis, y no habrá quien os espante; y quitaré de vuestra tierra las malas bestias, y la espada no pasará por vuestro país.
Entrará en la paz; descansarán en sus lechos todos los que andan en su rectitud.
Y cuando Herodes había de sacarle, aquella misma noche estaba Pedro durmiendo entre dos soldados, sujeto con dos cadenas, y los guardas delante de la puerta guardaban la cárcel.
El temor de Jehová es para vida; y con él vivirá lleno de reposo el hombre; no será visitado de mal.
Y estableceré con ellos pacto de paz, y haré cesar de la tierra las malas bestias; y habitarán en el desierto seguramente, y dormirán en los bosques.
Despierta; ¿por qué duermes, Señor? Despierta, no nos deseches para siempre.
Y tú vendrás a tus padres en paz, y serás sepultado en buena vejez.
Y en aquel tiempo haré para ellos pacto con las bestias del campo, con las aves del cielo y con los reptiles de la tierra; y quebraré arco y espada y la batalla de la tierra, y los haré dormir seguros.
Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Él a los que durmieron en Jesús.
Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará.
Entonces andarás por tu camino confiadamente, y tu pie no tropezará.
deja allí tu ofrenda delante del altar, y ve, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda.
Y he aquí, el ángel del Señor vino, y una luz resplandeció en la cárcel; y golpeando a Pedro en el costado, le despertó, diciendo: Levántate pronto. Y las cadenas se le cayeron de las manos.
El guarda respondió: La mañana viene, y después la noche; si preguntareis, preguntad; volved, venid.
Mas el que me oyere, habitará confiadamente, y vivirá reposado, sin temor del mal.
Por tanto, alabé yo la alegría; pues el hombre no tiene mejor bien debajo del sol, que comer y beber y alegrarse; y que esto le quede de su trabajo los días de su vida que Dios le concede debajo del sol.
Tú diste alegría a mi corazón, más que la de ellos en el tiempo que se multiplicó su grano y su mosto.
El lobo y el cordero pacerán juntos, y el león comerá paja como el buey; y el polvo será el alimento de la serpiente. No afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte, dice Jehová.
Pues aun con las piedras del campo tendrás alianza, y las fieras del campo tendrán paz contigo.
Mas no quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.
He aquí, un hijo te nacerá, el cual será varón pacífico, porque yo le daré reposo de todos sus enemigos en derredor; por tanto, su nombre será Salomón; y yo daré paz y reposo sobre Israel en sus días.
