45 Versículo de la Biblia sobre la ambición

Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia, la cual quita la vida de sus poseedores.

Sí, ellos son perros comilones e insaciables; y son pastores que no pueden entender: todos ellos miran por sus propios caminos, cada uno busca su propio provecho, cada uno por su lado.

Porque el amor al dinero es la raíz de todos los males; el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y se traspasaron con muchos dolores.

El hombre de mal ojo se apresura a ser rico; y no sabe que le ha de venir pobreza.

Y el Señor le dijo: Ahora, vosotros los fariseos limpiáis lo de fuera de la copa y del plato; pero por dentro estáis llenos de rapiña y de maldad.

mas no del todo con los fornicarios de este mundo, o con los avaros, o con los ladrones, o con los idólatras; pues entonces os sería necesario salir del mundo.

Porque desde el más chico de ellos hasta el más grande de ellos, cada uno sigue la avaricia; y desde el profeta hasta el sacerdote, todos son engañadores.

y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas, sobre los cuales la condenación ya de largo tiempo no se tarda, y su perdición no se duerme.

Y les dijo: Mirad, y guardaos de la avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee.

Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros como conviene a santos;

Alborota su casa el codicioso; mas el que aborrece el soborno vivirá.

Por tanto, daré sus esposas a otros, y sus campos a quienes los posean; porque desde el chico hasta el grande cada uno sigue la avaricia, desde el profeta hasta el sacerdote todos practican el engaño.

ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.

Porque nunca usamos de palabras lisonjeras, como sabéis; ni encubrimos avaricia; Dios es testigo;

Por la iniquidad de su codicia me enojé y lo herí, escondí mi rostro y me indigné; y él siguió rebelde por el camino de su corazón.

Haced morir, pues, vuestros miembros que están en la tierra; fornicación, impureza, pasiones desordenadas, mala concupiscencia y avaricia, que es idolatría;

Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino de ánimo pronto;

los hurtos, las avaricias, las maldades, los engaños, las lascivias, el ojo maligno, la blasfemia, la soberbia, la insensatez.

Mas ahora os he escrito, que no os asociéis con ninguno que, llamándose hermano, sea fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón, con el tal ni aun comáis.

los cuales habiendo perdido toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para con avidez cometer toda clase de impureza.

La sanguijuela tiene dos hijas que dicen: Dame, dame. Tres cosas hay que nunca se sacian; aun la cuarta nunca dice: ¡Basta!

La justicia de los rectos los librará; mas los pecadores en su pecado serán presos.

Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios.

El que ama el dinero, no se saciará de dinero; y el que ama el mucho tener, no sacará fruto. También esto es vanidad.

Y vendrán a ti como viene el pueblo, y estarán delante de ti como mi pueblo, y oirán tus palabras, y no las pondrán por obra; porque con su boca muestran mucho amor, pero su corazón va en pos de su avaricia.

El altivo de ánimo suscita contiendas; mas el que confía en Jehová, será prosperado.

Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre.

Los diáconos asimismo deben ser honestos, sin doblez, no dados a mucho vino, no amadores de ganancias deshonestas;

Entonces Giezi, criado de Eliseo el varón de Dios, dijo entre sí: He aquí mi señor estorbó a este sirio Naamán, no tomando de su mano las cosas que había traído. Vive Jehová, que correré yo tras él, y tomaré de él alguna cosa.

Como el león que desea hacer presa, y como el leoncillo acechando en su escondite.

No comas pan de hombre de mal ojo, ni codicies sus manjares;

Tienen los ojos llenos de adulterio, y no pueden dejar de pecar. Seducen a las almas inestables, tienen un corazón ejercitado en la codicia; son hijos de maldición.

Por tanto, he aquí que yo extendí sobre ti mi mano, y disminuí tu provisión ordinaria, y te entregué a la voluntad de las hijas de los filisteos, que te aborrecen, las cuales se avergüenzan de tu camino deshonesto.

Y llamó el nombre de aquel lugar Kibrot-hataava, por cuanto allí sepultaron al pueblo codicioso.

El rey con el juicio afirma la tierra; mas el que acepta el soborno la destruye.

estando atestados de toda iniquidad, fornicación, malicia, avaricia, maldad; llenos de envidias, homicidios, contiendas, engaños, malignidades;

Jehová lo guardará, y le dará vida; será bienaventurado en la tierra, y no lo entregarás a voluntad de sus enemigos.

No codicies sus manjares delicados, porque es pan engañoso.

Mas sus hijos no anduvieron por sus caminos, antes se desviaron tras la avaricia, recibiendo cohecho y pervirtiendo el derecho.

¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque limpiáis lo de fuera del vaso y del plato, pero por dentro estáis llenos de robo y de desenfreno.

Porque donde hay celos y contención, allí hay confusión y toda obra perversa.

Por tanto, no sentirá él sosiego en su vientre, ni salvará nada de lo que codiciaba.

Y la multitud de raza mixta que había entre ellos tuvo un vivo deseo, y los hijos de Israel también volvieron a llorar y dijeron: ¡Quién nos diera a comer carne!

He aquí que ésta fue la maldad de Sodoma tu hermana: Soberbia, abundancia de pan, y demasiada ociosidad tuvieron ella y sus hijas; y no fortaleció la mano del pobre y del menesteroso.

Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tu simiente para siempre. Y salió de delante de él leproso, blanco como la nieve.