30 Versículos de la Biblia sobre la vida natural

Mas lo espiritual no es primero, sino lo animal; luego lo espiritual.

Así también está escrito: Fué hecho el primer hombre Adam en ánima viviente; el postrer Adam en espíritu vivificante.

Porque muertos sois, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.

Porque El que quiere amar la vida, Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen engaño;

Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.

En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.

En el día del bien goza del bien; y en el día del mal considera. Dios también hizo esto delante de lo otro, porque el hombre no halle nada tras de él.

Mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal:

Porque mejor es tu misericordia que la vida: Mis labios te alabarán.

Porque contigo está el manantial de la vida: En tu luz veremos la luz.

Sobre toda cosa guardada guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.

Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como también algunos de vuestros poetas dijeron: Porque linaje de éste somos también.

Y había Jehová Dios hecho nacer de la tierra todo árbol delicioso á la vista, y bueno para comer: también el árbol de vida en medio del huerto, y el árbol de ciencia del bien y del mal.

Teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón:

Y Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida: el que á mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.

Reteniendo la palabra de vida para que yo pueda gloriarme en el día de Cristo, que no he corrido en vano, ni trabajado en vano.

Y serán vida á tu alma, Y gracia á tu cuello.

Con Cristo estoy juntamente crucificado, y vivo, no ya yo, mas vive Cristo en mí: y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, y se entregó á sí mismo por mí.

Porque el suceso de los hijos de los hombres, y el suceso del animal, el mismo suceso es: como mueren los unos, así mueren los otros; y una misma respiración tienen todos; ni tiene más el hombre que la bestia: porque todo es vanidad.

Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios, que vive y permanece para siempre.

Porque la intención de la carne es muerte; mas la intención del espíritu, vida y paz:

Humana cosa digo, por la flaqueza de vuestra carne: que como para iniquidad presentasteis vuestros miembros á servir á la inmundicia y á la iniquidad, así ahora para santidad presentéis vuestros miembros á servir á la justicia.

El espíritu de Dios me hizo, Y la inspiración del Omnipotente me dió vida.

Jesús le dice: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida: nadie viene al Padre, sino por mí.

Y hasta la vejez yo mismo, y hasta las canas os soportaré yo: yo hice, yo llevaré, yo soportaré y guardaré.

Porque escudo es la ciencia, y escudo es el dinero: mas la sabiduría excede en que da vida á sus poseedores.

Mas del árbol de ciencia del bien y del mal no comerás de él; porque el día que de él comieres, morirás.

Estos son los que hacen divisiones, sensuales, no teniendo el Espíritu.

A vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos de ánimo en malas obras, ahora empero os ha reconciliado

Aun un poquito, y el mundo no me verá más; empero vosotros me veréis; porque yo vivo, y vosotros también viviréis.