22 Versículos de la Biblia sobre los profetas individuales
Versículos Más Relevantes
Y nunca más se levantó profeta en Israel como Moisés, a quien haya conocido el SEÑOR cara a cara;
El SEÑOR dijo a Moisés: Mira, yo te he constituido por dios del Faraón, y tu hermano Aarón será tu profeta.
Y aconteció que, cuando todos los que le conocían de ayer y de anteayer, vieron como profetizaba con los profetas. Y el pueblo decía el uno al otro: ¿Qué le ha sucedido al hijo de Cis? ¿Saúl también entre los profetas? Y un varón de allí respondió, y dijo: ¿Y quién es el padre de ellos? Por esta causa se convirtió en proverbio: ¿También Saúl entre los profetas?
Y él también se despojó de sus vestidos, y profetizó también delante de Samuel, y cayó desnudo todo aquel día y toda aquella noche. De aquí se dijo: ¿También Saúl entre los profetas?
Mas en verdad os digo, que muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando el cielo fue cerrado por tres años y seis meses, que hubo una gran hambre en toda la tierra;
Y muchos leprosos había en Israel en tiempo del profeta Eliseo; mas ninguno de ellos fue limpio, sino Naamán el sirio.
Mas ¿qué salisteis a ver? ¿Profeta? También os digo, y más que profeta.
Y tú, niño: profeta del Altísimo serás llamado; porque irás delante de la faz del Señor, para aparejar sus caminos;
Y si decimos, de los hombres, tememos al pueblo; porque todos tienen a Juan por profeta.
Y si dijéremos, de los hombres, tememos al pueblo; porque todos juzgaban de Juan, que verdaderamente era profeta.
Y si dijéremos, de los hombres, todo el pueblo nos apedreará; porque están ciertos que Juan era profeta.
Y he aquí les aparecieron Moisés y Elías, hablando con él. Y respondiendo Pedro, dijo a Jesús: Señor, bien es que nos quedemos aquí; si quieres, hagamos aquí tres tabernáculos: para ti uno, y para Moisés otro, y otro para Elías.
Y he aquí dos varones que hablaban con él, los cuales eran Moisés y Elías;
Y algunos de los que estaban allí, oyéndolo, decían: A Elías llama éste.
Y oyéndole unos de los que estaban allí, decían: He aquí, llama a Elías.
Y corrió uno, y empapando una esponja en vinagre, y poniéndola en una caña, le dio a beber, diciendo: Dejad, veamos si vendrá Elías a quitarle.
Y el otro le dijo: Yo también soy profeta como tú, y un ángel me ha hablado por palabra del SEÑOR, diciendo: Vuélvele contigo a tu casa, para que coma pan y beba agua. Pero le mintió.
Y los moradores de la tierra se gozarán sobre ellos, y se alegrarán, y se enviarán dones los unos a los otros; porque estos dos profetas han atormentado a los que moran sobre la tierra.