42 Versículos de la Biblia sobre Sion

Mas en el Monte de Sion habrá salvamento, y será santidad, y la casa de Jacob, poseerá sus posesiones.

De Sion, perfección de hermosura, Dios ha resplandecido.

Porque el SEÑOR ha elegido a Sion; la deseó por habitación para sí.

Y de Sion se dirá; este y aquel varón es nacido en ella; y el mismo Altísimo la fortificará.

Irán en gran multitud y en orden, verán a Dios en Sion.

Y el SEÑOR bramará desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén, y temblarán los cielos y la tierra; mas el SEÑOR será la esperanza de su pueblo, y la fortaleza de los hijos de Israel.

Tú levantándote, tendrás misericordia de Sion; porque es tiempo de tener misericordia de ella, porque el plazo es llegado .

Canta, oh hija de Sion; da voces de júbilo, oh Israel; gózate y regocíjate de todo corazón, oh hija de Jerusalén.

Sino que escogió la tribu de Judá, el monte de Sion, al cual amó.

Porque de Jerusalén saldrá remanente, y del Monte de Sion escapadura; el celo del SEÑOR de los ejércitos hará esto.

Bendígate el SEÑOR desde Sion, y veas el bien de Jerusalén todos los días de tu vida.

Por lo cual también contiene la Escritura: He aquí, pongo en Sión la principal Piedra de la esquina, escogida, preciosa: Y el que creyere en ella, no será confundido.

Te envíe ayuda desde el santuario, y desde Sion te sustente.

Clama aún, diciendo: Así dice el SEÑOR de los ejércitos: Aún serán ensanchadas mis ciudades por la abundancia del bien; y aún consolará el SEÑOR a Sion, y escogerá todavía a Jerusalén.

Así dijo el SEÑOR: Yo restituiré a Sion, y moraré en medio de Jerusalén; y Jerusalén se llamará Ciudad de Verdad, y el monte del SEÑOR de los ejércitos, monte de Santidad.

Entonces Salomón juntó en Jerusalén los ancianos de Israel, y todos los príncipes de las tribus, los cabezas de las familias de los hijos de Israel, para que trajesen el arca del pacto del SEÑOR de la ciudad de David, que es Sion.

Asimismo dice el SEÑOR: Por cuanto las hijas de Sion se ensoberbecen, y andan con cuello erguido y los ojos descompuestos; y cuando andan, van como danzando, y haciendo son con los pies;

Andad alrededor de Sion, y rodeadla; contad sus torres.

Hermosa provincia, el gozo de toda la tierra es el monte de Sion, a los lados del aquilón, la ciudad del gran Rey.

Y vendrán salvadores al Monte de Sion para juzgar al monte de Esaú; y el Reino será del SEÑOR.

Alégrese Israel con su Hacedor; los hijos de Sion se gocen con su Rey.

Canción de las gradas. Los que confían en el SEÑOR son como el monte de Sion que no deslizará; estará para siempre.

Por causa de Sion no callaré, y por causa de Jerusalén no reposaré, hasta que salga como resplandor su justicia, y su salud se encienda como un hacha.

Pero David tomó la fortaleza de Sion, la cual es la ciudad de David.

Dichoso el hombre que tiene su fortaleza en ti; en cuyo corazón están tus caminos.

Sacúdete del polvo, levántate, siéntate, Jerusalén; suéltate de las ataduras de tu cuello, cautiva hija de Sion.

por tanto, pelará el Señor la mollera de las hijas de Sion, y el SEÑOR descubrirá sus vergüenzas.

Haz bien con tu voluntad a Sion; edifica los muros de Jerusalén.

El SEÑOR contará al inscribir a los pueblos: Este nació allí. (Selah.)

por cuanto el SEÑOR habrá edificado a Sion, y será visto en su gloria;

Porque será día de venganza del SEÑOR, año de pagamentos en el pleito de Sion.

Y tú, oh torre del rebaño, la fortaleza de la hija de Sion vendrá hasta ti; y vendrá el Señorío primero, el Reino, a la hija de Jerusalén.

Y de miedo se pasará a su fortaleza; y sus príncipes tendrán pavor de la bandera, dice el SEÑOR, al cual hay fuego en Sion, y al cual hay horno en Jerusalén.

Ciertamente consolará el SEÑOR a Sion, consolará todas sus soledades, y tornará su desierto como paraíso, y su soledad como huerto del SEÑOR; se hallará en ella alegría y gozo, confesión y voz de cantar.

Mas os habéis llegado al monte de Sión, y a la ciudad del Dios viviente, Jerusalén la celestial, y a la compañía de muchos millares de ángeles,

Y creará el SEÑOR sobre toda la morada del Monte de Sion, y sobre los lugares de sus convocaciones, nube y oscuridad de día, y de noche resplandor de fuego que eche llamas; porque sobre toda gloria habrá cobertura.

Oh Sion, la que moras con la hija de Babilonia, escápate.

Y acontecerá que el que quedare en Sion, y el que fuere dejado en Jerusalén, será llamado santo; todos los que en Jerusalén están escritos entre los vivientes;

Y vendrán a ti humillados los hijos de los que te afligieron; y a las pisadas de tus pies se encorvarán todos los que te escarnecían, y te llamarán Ciudad del SEÑOR, Sion del Santo de Israel.

y así todo Israel fuese salvo; como está escrito: Vendrá de Sión el Libertador, que quitará de Jacob la impiedad;