'Defensa' en la Biblia
Dios es mi Fuerte, en él confiaré; mi escudo, y el cuerno de mi salud; mi defensa, y mi refugio; mi salvador, que me librarás de violencia.
harán la guardia en la casa para su defensa; también una tercera parte {estará} en la puerta Sur, y otra tercera parte en la puerta detrás de los guardias.
Y Roboam habitó en Jerusalén, y edificó ciudades para defensa en Judá.
que el rey daba facultad a los judíos que estaban en todas la ciudades, que se juntaran y estuvieran a la defensa de su vida, prontos a destruir, matar, y acabar con todo ejército de pueblo o provincia que viniera contra ellos, y aun sus niños y mujeres, y que los saquearen,
Y los otros judíos que estaban en las provincias del rey, también se juntaron y se pusieron en defensa de su vida, y tuvieron reposo de sus enemigos, y mataron de sus enemigos setenta y cinco mil; mas en el despojo no metieron su mano.
Y el Todopoderoso será tu defensa, y tendrás plata a montones.
Mi defensa está en Dios, que salva a los rectos de corazón.
El SEÑOR es la fuerza de su pueblo, y El es defensa salvadora de su ungido.
Despierta y levántate para mi defensa y para mi causa, Dios mío y Señor mío.
Para ti reservaré su fortaleza; porque Dios es mi defensa.
Entonces cayó la defensa de Judá. Confiasteis aquel día en las armas de la casa del bosque,
Se acuerda él de sus nobles {que} tropiezan en su marcha, se apresuran a su muralla, y es preparada la defensa.
Y seré defensa y amparo firme a mi Casa, del que va y del que viene; y no pasará más sobre ellos angustiador; porque ahora miré con mis ojos.
Y cuando os lleven a las sinagogas y ante los gobernantes y las autoridades, no os preocupéis de cómo o de qué hablaréis en defensa propia, o qué vais a decir;
Por tanto, proponed en vuestros corazones no preparar de antemano vuestra defensa;
Y algunos de la multitud dedujeron {que se trataba de} Alejandro, puesto que los judíos lo habían empujado hacia adelante. Entonces Alejandro, haciendo señal {de silencio} con la mano, quería hacer su defensa ante la asamblea.
Hermanos y padres, escuchad mi defensa que ahora {presento} ante vosotros.
Después que el gobernador le hizo una señal para que hablara, Pablo respondió: Sabiendo que por muchos años tú has sido juez de esta nación, con gusto presento mi defensa,
mientras Pablo decía en defensa propia: No he cometido ningún delito, ni contra la ley de los judíos, ni contra el templo, ni contra el César.
Y Agripa dijo a Pablo: Se te permite hablar en tu favor. Entonces Pablo, extendiendo la mano, comenzó su defensa:
Con respecto a todo aquello de que los judíos me acusan, me considero afortunado, {oh} rey Agripa, de poder presentar hoy mi defensa delante de ti,
Y diciendo él estas cosas en su defensa, Festo á gran voz dijo: Estás loco, Pablo: las muchas letras te vuelven loco.
Mi defensa contra los que me examinan es ésta:
Porque he aquí esto mismo, que según Dios fuisteis contristados, ¿cuánta solicitud ha obrado en vosotros? ¡Qué defensa, qué enojo, qué temor, qué (gran) deseo, qué celo, y qué vindicación! En todo os habéis mostrado limpios en el asunto.
como me es justo sentir esto de todos vosotros, por cuanto os tengo en el corazón; y en mis prisiones, y en la defensa y confirmación del Evangelio, sois todos vosotros compañeros de mi gracia.
éstos {lo hacen} por amor, sabiendo que he sido designado para la defensa del evangelio;
pero los otros por caridad, sabiendo que soy puesto en ellas por la defensa del Evangelio.
En mi primera defensa ninguno me ayudó, antes me desampararon todos; no les sea imputado.
sino santificad a Cristo como Señor en vuestros corazones, {estando} siempre preparados para presentar defensa ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros, pero {hacedlo} con mansedumbre y reverencia;