'Interior' en la Biblia
Luego Salomón cubrió de oro puro la casa por dentro, y cerró la entrada del santuario interior con cadenas de oro, y lo cubrió de oro.
Y edificó el atrio interior de tres hileras de piedras labradas, y de una hilera de vigas de cedro.
Y en el gran atrio alrededor había tres hileras de piedras labradas, y una hilera de vigas de cedro; y así el atrio interior de la casa de Jehová, y el atrio de la casa.
Estaba asentado sobre doce bueyes, tres de los cuales miraban al norte, y tres al occidente, y tres al sur, y tres al oriente; y el mar asentaba sobre ellos, y todas sus traseras estaban hacia el interior.
Asimismo los candeleros y sus candilejas, de oro puro, para que las encendiesen delante del santuario interior conforme a la costumbre.
Y los sacerdotes metieron el arca del pacto de Jehová en su lugar, en el santuario interior de la casa, en el lugar santísimo, bajo las alas de los querubines;
E hicieron salir fuera las barras, de modo que se viesen las cabezas de las barras del arca delante del santuario interior, pero no se veían desde fuera; y allí han quedado hasta hoy.
Y aconteció que al tercer día se vistió Esther su vestido real, y se puso en el patio interior de la casa del rey, frente al aposento del rey; y el rey estaba sentado en su trono regio en el aposento real, frente a la puerta del aposento.
Toda gloriosa en su interior es la hija del Rey; de brocado de oro es su vestido.
En su interior piensan que sus casas serán eternas, y sus habitaciones para generación y generación; dan sus nombres a sus tierras.
El que odia, disimula con sus labios; pero en su interior maquina engaño.
Sus columnas hizo de plata, su respaldo de oro, su asiento de grana, su interior tapizado de amor, por las doncellas de Jerusalén.
Por tanto, mis entrañas sonarán como arpa por Moab, y mi interior por Kir-hareset.
Y desde el frente de la puerta de la entrada hasta el frente de la entrada de la puerta interior, cincuenta codos.
Y midió la anchura desde el frente de la puerta de abajo hasta el frente del atrio interior por fuera, de cien codos hacia el oriente y el norte.
Y la puerta del atrio interior estaba enfrente de la puerta al norte; y así al oriente; y midió de puerta a puerta cien codos.
Y había una puerta que daba hacia el sur del atrio interior; y midió de puerta a puerta hacia el sur cien codos.
Y me llevó al atrio interior hacia el oriente, y midió la puerta conforme a estas medidas.
Y fuera de la puerta interior, en el atrio de adentro que estaba al lado de la puerta del norte, estaban las cámaras de los cantores, las cuales miraban hacia el sur; una estaba al lado de la puerta del oriente que miraba hacia el norte.
Y pasó al interior, y midió cada poste de la puerta de dos codos; y la puerta de seis codos; y la anchura de la entrada de siete codos.
Y será que cuando entraren por las puertas del atrio interior, se vestirán de vestiduras de lino; no llevarán sobre ellos lana, cuando ministraren en las puertas del atrio de adentro y en el templo.
Y ninguno de los sacerdotes beberá vino cuando haya de entrar en el atrio interior.
Y el sacerdote tomará de la sangre de la expiación, y pondrá sobre los postes de la casa, y sobre los cuatro ángulos del descanso del altar, y sobre los postes de las puertas del atrio interior.
Así dice Jehová el Señor: La puerta del atrio interior que mira al oriente, estará cerrada los seis días de trabajo, y el día del sábado se abrirá; se abrirá también el día de la luna nueva.
El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.
sino que es judío el que lo es en el interior; y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra; cuya alabanza no es de los hombres, sino de Dios.
Porque según el hombre interior me deleito en la ley de Dios;
Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día.
para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu;
sino el del hombre interior, el del corazón, en incorruptible ornato de espíritu humilde y apacible, lo cual es de grande estima delante de Dios.