'Juzgo' en la Biblia
Entonces Raquel dijo: ``Dios me ha vindicado. Ciertamente ha oído mi voz y me ha dado un hijo." Por tanto le puso por nombre Dan (El juzgó).
"Cuando tienen un pleito, vienen a mí, y yo juzgo entre uno y otro, dándo{les} a conocer los estatutos de Dios y Sus leyes."
Y vino sobre él el Espíritu del SEÑOR, y juzgó a Israel. Cuando salió a la guerra, el SEÑOR entregó en su mano a Cusán Risataim, rey de Mesopotamia, y su poder prevaleció sobre Cusán Risataim.
Tola juzgó a Israel veintitrés años. Y murió y fue sepultado en Samir.
Y tras él se levantó Jair el Galaadita, y juzgó a Israel veintidós años.
Jefté juzgó a Israel seis años. Y murió Jefté el Galaadita, y fue sepultado en {una de} las ciudades de Galaad.
Después de Jefté juzgó a Israel Ibzán de Belén (Casa del Pan).
Y tuvo treinta hijos y treinta hijas, {a éstas las} casó fuera {de la familia,} y trajo de afuera treinta hijas para sus hijos. El juzgó a Israel siete años.
Después de Ibzán, juzgó a Israel Elón el Zabulonita; quien juzgó a Israel diez años.
Entonces Abdón, hijo de Hilel el Piratonita, juzgó a Israel después de Elón.
Tuvo cuarenta hijos y treinta nietos que cabalgaban en setenta asnos. El juzgó a Israel ocho años.
{Sansón} juzgó a Israel veinte años en los días de los Filisteos.
Se reunieron los Israelitas en Mizpa, y sacaron agua y {la} derramaron delante del SEÑOR, ayunaron aquel día y dijeron allí: ``Hemos pecado contra el SEÑOR." Y Samuel juzgó a los Israelitas en Mizpa.
Samuel juzgó a Israel todos los días de su vida.
``Yo no puedo hacer nada por iniciativa Mía; como oigo, juzgo, y Mi juicio es justo porque no busco Mi voluntad, sino la voluntad del que Me envió.
"Ustedes juzgan según la carne; Yo no juzgo a nadie.
"Pero si Yo juzgo, Mi juicio es verdadero; porque no soy Yo solo, sino Yo y el Padre que Me envió.
"Si alguno oye Mis palabras y no las guarda, Yo no lo juzgo; porque no vine a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo.
En cuanto a mí, es de poca importancia que yo sea juzgado por ustedes o por {cualquier} tribunal humano. De hecho, ni aun yo me juzgo a mí mismo.