'Llegué' en la Biblia

Y dijeron: Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra.

Llegué, pues, hoy á la fuente, y dije: Jehová, Dios de mi señor Abraham, si tú prosperas ahora mi camino por el cual ando;

Pase ahora mi señor delante de su siervo, y yo me iré poco á poco al paso de la hacienda que va delante de mí, y al paso de los niños, hasta que llegue á mi señor á Seir.

En recuerdo á los hijos de Israel que ningún extraño que no sea de la simiente de Aarón, llegue á ofrecer sahumerio delante de Jehová, porque no sea como Coré, y como su séquito; según se lo dijo Jehová por mano de Moisés.

Y no ande la heredad rodando de una tribu á otra: mas cada una de las tribus de los hijos de Israel se llegue á su heredad.

Y le pusiere algunas faltas, y esparciere sobre ella mala fama, y dijere: Esta tomé por mujer, y llegué á ella, y no la hallé virgen;

Entonces el varón Levita, marido de la mujer muerta, respondió y dijo: Yo llegué á Gabaa de Benjamín con mi concubina, para tener allí la noche.

Dijo además David: Vive Jehová, que si Jehová no lo hiriere, ó que su día llegue para que muera, ó que descendiendo en batalla perezca,

Entonces una mujer sabia dió voces en la ciudad, diciendo: Oid, oid; ruégoos que digáis á Joab se llegue á acá, para que yo hable con él.

Además dije al rey: Si al rey place, dénseme cartas para los gobernadores de la otra parte del río, que me franqueen el paso hasta que llegue á Judá;

Llegué pues á Jerusalem, y estado que hube allí tres días,

Aunque llegue la mano á la mano, el malo no quedará sin castigo: Mas la simiente de los justos escapará.

Con cuerdas humanas los traje, con cuerdas de amor: y fuí para ellos como los que alzan el yugo de sobre sus mejillas, y llegué hacia él la comida.

¿No decís vosotros: Aun hay cuatro meses hasta que llegue la siega? He aquí os digo: Alzad vuestros ojos, y mirad las regiones, porque ya están blancas para la siega.

Ahora pues, vosotros, con el concilio, requerid al tribuno que le saque mañana á vosotros como que queréis entender de él alguna cosa más cierta; y nosotros, antes que él llegue, estaremos aparejados para matarle.

Y sé que cuando llegue á vosotros, llegaré con abundancia de la bendición del evangelio de Cristo.

Para que con gozo llegue á vosotros por la voluntad de Dios, y que sea recreado juntamente con vosotros.