'Rogó' en la Biblia
Si tu padre hiciere mención de mí, dirás: Me rogó mucho que lo dejase ir corriendo a Belén su ciudad, porque todos los de su familia celebran allá el sacrificio anual.
Entonces David rogó a Dios por el niño; y ayunó David, y entró, y pasó toda la noche acostado en tierra.
Y volvió a enviar el tercer capitán de cincuenta con sus cincuenta; y subiendo aquel tercer capitán de cincuenta, se hincó de rodillas delante de Elías, y le rogó, diciendo: Varón de Dios, te ruego que sea de valor delante de tus ojos mi vida, y la vida de estos tus cincuenta siervos.
Sí, luchó con el Ángel, y prevaleció; lloró, y le rogó; en Betel le encontró, y allí habló con nosotros.
Y entrado en una de las barcas, la cual era de Simón, le rogó que la apartase de tierra un poco; y sentándose, enseñaba desde la barca a la multitud.
Y aconteció que estando en una ciudad, he aquí un hombre lleno de lepra, el cual viendo a Jesús, se postró sobre su rostro, y le rogó, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.
Y uno de los fariseos le rogó que comiese con él. Y entrado en casa del fariseo, se sentó a la mesa.
Entonces toda la multitud de la tierra de los gadarenos alrededor, le rogó que se fuese de ellos; porque tenían gran temor. Y Él, subiendo en la barca, se volvió.
Y luego que hubo hablado, le rogó un fariseo que comiese con él; y entrando Jesús, se sentó a la mesa.
Éste, cuando oyó que Jesús venía de Judea a Galilea, vino a Él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, porque estaba a punto de morir.
Y después de estas cosas, José de Arimatea, el cual era discípulo de Jesús, aunque secreto por miedo a los judíos, rogó a Pilato que le dejase quitar el cuerpo de Jesús; y Pilato se lo permitió. Entonces vino, y quitó el cuerpo de Jesús.
Y dijo: ¿Cómo podré, a no ser que alguien me enseñe? Y rogó a Felipe que subiese y se sentase con él.
Y cuando fue bautizada, ella, y su familia, nos rogó, diciendo: Si habéis juzgado que yo sea fiel al Señor, entrad en mi casa; y nos constriñó a quedarnos.
Entonces él le tomó y le llevó al tribuno, y dijo: El preso Pablo, llamándome, me rogó que trajese a ti a este joven, porque tiene algo que decirte.