'Sembró' en la Biblia
Isaac sembró en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno. Y el SEÑOR lo bendijo.
A la vigilia de la mañana (2 a 6 a.m.), el SEÑOR miró el ejército de los Egipcios desde la columna de fuego y de nube, y sembró la confusión en el ejército de los Egipcios.
Y peleó Abimelec contra la ciudad todo aquel día, capturó la ciudad y mató a la gente que {había} en ella. Entonces arrasó la ciudad y la sembró de sal.
"A todo el que oye la palabra del reino y no {la} entiende, el maligno viene y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es aquél en quien se sembró la semilla junto al camino.
"Y aquél en quien se sembró la semilla en pedregales, éste es el que oye la palabra y enseguida la recibe con gozo;
"Y aquél en quien se sembró la semilla entre espinos, éste es el que oye la palabra, pero las preocupaciones del mundo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se queda sin fruto.
"Pero aquél en quien se sembró la semilla en tierra buena, éste es el que oye la palabra y la entiende; éste sí da fruto y produce, uno a ciento, otro a sesenta y otro a treinta por uno."
Jesús les contó otra parábola: ``El reino de los cielos puede compararse a un hombre que sembró buena semilla en su campo.
"Pero mientras los hombres dormían, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue.
"Y los siervos del dueño fueron y le dijeron: `Señor, ¿no sembró usted buena semilla en su campo? ¿Cómo, pues, tiene cizaña?'
Otra parábola les contó Jesús: ``El reino de los cielos es semejante a un grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo,
el enemigo que la sembró es el diablo, la siega es el fin del mundo, y los segadores son los ángeles.
``Pero llegando también el que había recibido un talento (21.6 kilos), dijo: `Señor, yo sabía que usted es un hombre duro, que siega donde no sembró y recoge donde no ha esparcido,
"Y de igual manera, éstos en que se sembró la semilla en pedregales son los que al oír la palabra enseguida la reciben con gozo;
"Otros son aquéllos en los que se sembró la semilla entre los espinos; éstos son los que han oído la palabra,
"Y otros son aquéllos en que se sembró la semilla en tierra buena; los cuales oyen la palabra, la aceptan y dan fruto, unos a treinta, otros a sesenta y otros a ciento por uno."
pues a usted le tenía miedo, porque es un hombre exigente, que recoge lo que no depositó y siega lo que no sembró.'