Porque así ha dicho el Señor DIOS, el Santo de Israel: En arrepentimiento y en reposo seréis salvos; en quietud y confianza está vuestro poder. Pero no quisisteis,

Por tanto, dad frutos dignos de arrepentimiento;

Yo a la verdad os bautizo con agua para arrepentimiento, pero el que viene detrás de mí es más poderoso que yo, a quien no soy digno de quitarle las sandalias; El os bautizará con el Espíritu Santo y con fuego.

Juan el Bautista apareció en el desierto predicando el bautismo de arrepentimiento para el perdón de pecados.

Y él fue por toda la región contigua al Jordán, predicando un bautismo de arrepentimiento para el perdón de los pecados;

Por tanto, dad frutos dignos de arrepentimiento; y no comencéis a deciros a vosotros mismos: ``Tenemos a Abraham por padre", porque os digo que Dios puede levantar hijos a Abraham de estas piedras.

No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento.

Os digo que de la misma manera, habrá {más} gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentimiento.

y que en su nombre se predicara el arrepentimiento para el perdón de los pecados a todas las naciones, comenzando desde Jerusalén.

A éste Dios exaltó a su diestra como Príncipe y Salvador, para dar arrepentimiento a Israel, y perdón de pecados.

Y al oír esto se calmaron, y glorificaron a Dios, diciendo: Así que también a los gentiles ha concedido Dios el arrepentimiento {que conduce} a la vida.

después de que Juan predicó, antes de su venida, un bautismo de arrepentimiento a todo el pueblo de Israel.

Y Pablo dijo: Juan bautizó con el bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyeran en aquel que vendría después de él, es decir, en Jesús.

testificando solemnemente, tanto a judíos como a griegos, del arrepentimiento para con Dios y de la fe en nuestro Señor Jesucristo.

sino que anunciaba, primeramente a los que {estaban} en Damasco y {también} en Jerusalén, y {después} por toda la región de Judea, y {aun} a los gentiles, que debían arrepentirse y volverse a Dios, haciendo obras dignas de arrepentimiento.

¿O tienes en poco las riquezas de su bondad, tolerancia y paciencia, ignorando que la bondad de Dios te guía al arrepentimiento?

{pero} ahora me regocijo, no de que fuisteis entristecidos, sino de que fuisteis entristecidos para arrepentimiento; porque fuisteis entristecidos conforme a {la voluntad de} Dios, para que no sufrierais pérdida alguna de parte nuestra.

Porque la tristeza que es conforme a {la voluntad de} Dios produce un arrepentimiento {que conduce} a la salvación, sin dejar pesar; pero la tristeza del mundo produce muerte.

corrigiendo tiernamente a los que se oponen, por si acaso Dios les da el arrepentimiento que conduce al pleno conocimiento de la verdad,

Por tanto, dejando las enseñanzas elementales acerca de Cristo, avancemos hacia la madurez, no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas y de la fe hacia Dios,

pero {después} cayeron, es imposible renovarlos otra vez para arrepentimiento, puesto que de nuevo crucifican para sí mismos al Hijo de Dios y le exponen a la ignominia pública.

Porque sabéis que aun después, cuando quiso heredar la bendición, fue rechazado, pues no halló ocasión para el arrepentimiento, aunque la buscó con lágrimas.

El Señor no se tarda {en cumplir} su promesa, según algunos entienden la tardanza, sino que es paciente para con vosotros, no queriendo que nadie perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento.