'Cesarea' en la Biblia
Y viniendo Jesús a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?
Y salieron Jesús y sus discípulos por las aldeas de Cesarea de Filipo. Y en el camino preguntó a sus discípulos, diciéndoles: ¿Quién dicen los hombres que soy yo?
Pero Felipe se halló en Azoto; y pasando, predicaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.
Y cuando lo supieron los hermanos, le trajeron hasta Cesarea, y le enviaron a Tarso.
Y había un varón en Cesarea llamado Cornelio, centurión de la compañía llamada la Italiana,
Y al otro día entraron en Cesarea. Y Cornelio los estaba esperando, habiendo convocado a sus parientes y amigos más íntimos.
Y he aquí, en seguida vinieron tres hombres a la casa donde yo estaba, enviados a mí de Cesarea.
Y cuando Herodes le buscó y no le halló, habiendo interrogado a los guardas, ordenó que éstos fueran llevados a la muerte. Y él descendió de Judea a Cesarea, y se quedó allí.
Y habiendo arribado a Cesarea, subió para saludar a la iglesia, y luego descendió a Antioquía.
Y al día siguiente, partiendo Pablo y los que con él estábamos, vinimos a Cesarea; y entrando en casa de Felipe el evangelista, que era uno de los siete, posamos con él.
Y vinieron también con nosotros de Cesarea algunos de los discípulos, trayendo consigo a un Mnasón, de Chipre, un discípulo antiguo, con quien nos hospedaríamos.
Y llamando a dos centuriones, les dijo: Preparad para la hora tercera de la noche doscientos soldados, y setenta de a caballo y doscientos lanceros, para que vayan hasta Cesarea;
Los cuales, como llegaron a Cesarea, y dieron la carta al gobernador, presentaron también a Pablo delante de él.
Festo, pues, entrado en la provincia, tres días después subió de Cesarea a Jerusalén.
Pero Festo respondió que Pablo estuviese guardado en Cesarea, y que él mismo iría allá en breve.
Y deteniéndose entre ellos más de diez días, descendió a Cesarea; y el día siguiente se sentó en el tribunal, y mandó que trajesen a Pablo.
Y pasados algunos días, el rey Agripa y Bernice vinieron a Cesarea a saludar a Festo.