'Espada' en la Biblia
Entonces los hijos de Judá pelearon contra Jerusalén y la tomaron, pasaron a filo de espada {a sus habitantes} y prendieron fuego a la ciudad.
El les mostró la entrada de la ciudad, e hirieron la ciudad a filo de espada, pero dejaron ir al hombre y a toda su familia.
Aod se hizo una espada de dos filos, de un codo (45 cm) de largo, y la ató a su muslo derecho debajo de la ropa.
Aod alargó la mano izquierda, tomó la espada de su muslo derecho, y se la hundió en el vientre.
Y la empuñadura entró también tras la hoja, y la gordura se cerró sobre la hoja, pues no sacó la espada de su vientre. Y se le salieron los excrementos.
El SEÑOR derrotó a Sísara, con todos {sus} carros y todo {su} ejército, a filo de espada delante de Barac. Y Sísara bajó de {su} carro, y huyó a pie.
Barac persiguió los carros y el ejército hasta Haroset Goyim, y todo el ejército de Sísara cayó a filo de espada. No quedó ni uno.
Su amigo le respondió: ``Esto no es otra cosa que la espada de Gedeón, hijo de Joás, varón de Israel. Dios ha entregado en su mano a Madián y a todo el campamento."
Cuando las tres compañías tocaron las trompetas, rompieron los cántaros, y sosteniendo las antorchas en la mano izquierda y las trompetas en la mano derecha para tocarlas, gritaron: `` ¡La espada del SEÑOR y de Gedeón!"
Cuando tocaron las 300 trompetas, el SEÑOR puso la espada del uno contra el otro por todo el campamento; y el ejército huyó hasta Bet Sita, en dirección de Zerera, hasta la orilla de Abel Mehola, junto a Tabat.
Ahora bien, Zeba y Zalmuna estaban en Carcor, y sus ejércitos con ellos, unos 15,000 hombres, los que habían quedado de todo el ejército de los hijos del oriente. Porque los que habían caído eran 120,000 hombres que sacaban espada.
Y dijo a Jeter su primogénito: ``Levántate y mátalos." Pero el joven no sacó la espada porque tenía temor, pues todavía era muchacho.
Entonces él llamó apresuradamente al muchacho que era su escudero, y le dijo: ``Saca tu espada y mátame, no sea que se diga de mí: `Una mujer lo mató.'" Y el muchacho lo traspasó, y murió.
Entonces los Danitas tomaron lo que Micaía había hecho, y al sacerdote que le había pertenecido, y llegaron a Lais, a un pueblo tranquilo y confiado. Y los hirieron a filo de espada e incendiaron la ciudad.
Y los jefes de todo el pueblo, de todas las tribus de Israel, tomaron su puesto en la asamblea del pueblo de Dios, 400,000 soldados de a pie que sacaban espada.
De las ciudades fueron contados en aquel día, de los Benjamitas, 26,000 hombres que sacaban espada, además de los habitantes de Guibeá que fueron contados, 700 hombres escogidos.
Entonces los hombres de Israel, aparte de Benjamín, fueron contados, 400,000 hombres que sacaban espada. Todos éstos eran hombres de guerra.
Y salió Benjamín de Guibeá contra ellos el segundo día y otra vez hizo caer 18,000 hombres de los Israelitas. Todos éstos sacaban espada.
Y el SEÑOR hirió a Benjamín delante de Israel, de modo que los Israelitas mataron ese día a 25,100 hombres de Benjamín, todos ellos sacaban espada.
los emboscados se apresuraron y se lanzaron contra Guibeá. Entonces se desplegaron e hirieron toda la ciudad a filo de espada.
El total de los de Benjamín que cayeron aquel día fue de 25,000 hombres que sacaban espada, todos ellos valientes guerreros.
Entonces los hombres de Israel se volvieron contra los hijos de Benjamín y los hirieron a filo de espada, a toda la ciudad, así como el ganado y todo lo que encontraron; también prendieron fuego a todas las ciudades que hallaron.
La congregación envió a 12,000 de los hombres de guerra (valientes guerreros) allá, y les mandaron diciendo: ``Vayan y hieran a los habitantes de Jabes Galaad a filo de espada, con las mujeres y los niños.