'Estamos' en la Biblia
Y el día había comenzado a declinar; y acercándose los doce, le dijeron: Despide a la multitud, para que yendo a las aldeas y heredades de alrededor, procedan a alojarse y hallen viandas; porque aquí estamos en lugar desierto.
y aquél, respondiendo desde adentro, le dice: ``No me molestes; la puerta ya está cerrada, y mis hijos y yo estamos acostados; no puedo levantarme para darte {nada.}"
Así que, luego envié a ti; y tú has hecho bien en venir. Ahora pues, todos nosotros estamos aquí en la presencia de Dios, para oír todo lo que Dios te ha mandado.
Entonces Pablo clamó a gran voz, diciendo: No te hagas ningún mal; que todos estamos aquí.
Porque estamos en peligro de ser acusados de sedición por esto de hoy, no habiendo ninguna causa por la cual podamos dar razón de este concurso.
Ahora pues, vosotros y el concilio, avisad al comandante para que lo haga comparecer ante vosotros, como si quisierais hacer una investigación más minuciosa para resolver su caso; nosotros por nuestra parte estamos listos para matarlo antes de que llegue.
por el cual también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria (de los hijos) de Dios.
¿Pues qué? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? En ninguna manera.
Mas ahora estamos libres de la ley, habiendo muerto á aquella en la cual estábamos detenidos, para que sirvamos en novedad de espíritu, y no en vejez de letra.
Hasta esta hora hambrientos, y tenemos sed, y estamos mal vestidos, y somos heridos de golpes, y andamos vagabundos;
{Y} también, ¿por qué estamos en peligro a toda hora?
Pero nosotros todos, con el rostro descubierto, contemplando como en un espejo la gloria del Señor, estamos siendo transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Señor, el Espíritu.
Que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados;
Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados á muerte por Jesús, para que también la vida de Jesús sea manifestada en nuestra carne mortal.
y si así estamos vestidos, no seremos hallados desnudos.
Porque asimismo los que estamos en este tabernáculo, gemimos cargados; porque no queremos ser desnudados; antes sobrevestidos, consumiendo la vida a lo que es mortal.
Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo, que entre tanto que estamos en casa en el cuerpo, peregrinamos del Señor;
Estamos confiados, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes con el Señor.
Porque si estamos locos, es para Dios; y si somos cuerdos, es para vosotros.
Mas espero que conoceréis que nosotros no estamos reprobados.
Mas venida la fe, ya no estamos bajo la mano del ayo;
para que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros sabéis que nosotros estamos puestos para esto.
Porque no sujetó a los ángeles el mundo venidero, acerca del cual estamos hablando.
Pero en cuanto a vosotros, amados, aunque hablemos de esta manera, estamos persuadidos de las cosas que son mejores y que pertenecen a la salvación.
Mas el que guarda su Palabra, la caridad de Dios está verdaderamente perfecta en él; por esto sabemos que estamos en él.
En esto conocemos que estamos en él, y él en nosotros, en que nos ha dado de su Espíritu.
Pero sabemos que el Hijo de Dios es venido, y nos ha dado entendimiento; para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.