'Esté' en la Biblia
Hubo un varón en tierra de Uz, llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, y temeroso de Dios, y apartado del mal.
Aun estaba éste hablando, y vino otro que dijo: Fuego de Dios cayó del cielo, que quemó las ovejas y los criados, y los consumió; solamente escapé yo para traerte las nuevas.
Todavía estaba éste hablando, y vino otro que dijo: Los caldeos hicieron tres escuadrones, y dieron sobre los camellos, y los tomaron, e hirieron a los criados a filo de espada; y solamente escapé yo para traerte las nuevas.
Entre tanto que éste hablaba, vino otro que dijo: Tus hijos y tus hijas estaban comiendo y bebiendo vino en casa de su hermano el primogénito;
Y tres amigos de Job, Elifaz temanita, y Bildad suhita, y Zofar naamatita, luego que oyeron todo este mal que le había sobrevenido, vinieron cada uno de su lugar; porque habían concertado de venir juntos a condolerse de él, y a consolarle.
¿Es éste tu temor, tu confianza, tu esperanza, y la perfección de tus caminos?
Si le arrancaren de su lugar, éste le negará entonces, diciendo: Nunca te vi.
Ciertamente este será el gozo de su camino; y de la tierra de donde se traspusiere , retoñecerán otros.
Y hablaré, y no le temeré; porque en este estado no estoy en mí.
Ciertamente tales son las moradas del impío, y éste es el lugar del que no conoció a Dios.
He aquí que su bien no está en manos de ellos; el consejo de los impíos lejos esté de mí.
Este morirá en la fortaleza de su hermosura, todo quieto y pacífico.
Y este otro morirá en amargura de ánimo, y no habiendo comido jamás con gusto.
Por tanto, varones de entendimiento, oídme: Lejos esté de Dios la impiedad, y del Omnipotente la iniquidad.