'Hablen' en la Biblia
Cuando pasaron los días de luto por él, José habló a la casa de Faraón: ``Si he hallado ahora gracia ante los ojos de ustedes, les ruego que hablen a Faraón, diciendo:
"Hablen a toda la congregación de Israel y digan: `El {día} diez de este mes cada uno tomará para sí un cordero, según sus casas paternas; un cordero para cada casa.
``Toma la vara y reúne a la congregación, tú y tu hermano Aarón, y hablen a la peña a la vista de ellos, para que {la peña} dé su agua. Así sacarás para ellos agua de la peña, y beban la congregación y sus animales."
``Hablen ahora a oídos de todos los habitantes de Siquem: ` ¿Qué es mejor para ustedes, que todos los hijos de Jerobaal, setenta hombres, reinen sobre ustedes, o que reine sobre ustedes un solo hombre?' Además, acuérdense que yo soy hueso y carne de ustedes."
Y todos los que {lo} veían, decían: ``Nada como esto {jamás} ha sucedido ni se ha visto desde el día en que los Israelitas subieron de la tierra de Egipto hasta el día de hoy. Considérenlo, tomen consejo y hablen."
Entonces Saúl ordenó a sus siervos: ``Hablen en secreto a David y díganle: `El rey se deleita en ti y todos sus siervos te aman; ahora pues, sé yerno del rey.'"
Entonces el rey David envió {mensaje} a los sacerdotes Sadoc y Abiatar y dijo: ``Hablen a los ancianos de Judá, y díganles: ` ¿Por qué son los últimos en hacer volver al rey a su casa, ya que la palabra de todo Israel ha llegado al rey, a su casa?
Cántenle, cántenle alabanzas; Hablen de todas Sus maravillas.
No levanten en alto su frente; No hablen con orgullo insolente.'"
Cántenle, cántenle; Hablen de todas Sus maravillas.
Ofrezcan también sacrificios de acción de gracias Y hablen de Sus obras con cantos de júbilo.
Aunque los príncipes se sienten {y} hablen contra mí, tu siervo medita en tus estatutos.
Caf La gloria de tu reino digan, y hablen de tu fortaleza;
y se regocijarán mis entrañas cuando tus labios hablen lo que es recto.
En aquel tiempo habrá cinco ciudades en la tierra de Egipto, que hablen la lengua de Canaán, y que juren por el SEÑOR de los ejércitos; la una será llamada la ciudad Herez.
``Hablen al corazón de Jerusalén Y díganle a voces que su lucha ha terminado, Que su iniquidad ha sido quitada, Que ha recibido de la mano del SEÑOR El doble por todos sus pecados."
Escuchadme, islas, y esfuércense los pueblos; acérquense, y entonces hablen; estemos juntamente a juicio.
Porque aun tus hermanos y la casa de tu padre, aun ellos se levantaron contra ti, aun ellos dieron voces en pos de ti. No les creas, cuando bien te hablen.
Y cuando los hijos de tu pueblo te hablen, diciendo: `` ¿No nos explicarás qué quieres decir con esto?",
Y yo os digo que de toda palabra vana que hablen los hombres, darán cuenta de ella en el día del juicio.
"Cuando los lleven y los entreguen, no se preocupen de antemano por lo que van a decir, sino que lo que les sea dado en aquella hora, eso hablen; porque no son ustedes los que hablan, sino el Espíritu Santo.
¿Ay {de vosotros,} cuando todos los hombres hablen bien de vosotros!, porque de la misma manera trataban sus padres a los falsos profetas.
Todavía, para que no se divulgue más por el pueblo, amenacémoslos, que no hablen de aquí en adelante a hombre alguno en este Nombre.
Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y da a tus siervos que con toda confianza hablen tu palabra;
``Vayan, preséntense en el templo, y hablen al pueblo todo el mensaje (todas las palabras) de esta Vida (la Vida eterna que Cristo reveló)."
Después de la lectura de la Ley y los Profetas, los oficiales de la sinagoga les mandaron a decir: ``Hermanos, si tienen alguna palabra de exhortación para el pueblo, hablen."
y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas, para llevar discípulos tras sí.
Les ruego, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que todos se pongan de acuerdo (que hablen lo mismo), y que no haya divisiones entre ustedes, sino que estén enteramente unidos en un mismo sentir (de una misma mente) y en un mismo parecer.
Si alguno habla en lenguas, que {hablen} dos, o a lo más tres, y por turno, y que uno interprete;
Asimismo, los profetas hablen dos o tres, y los demás juzguen.
Por tanto, dejando a un lado la falsedad, HABLEN VERDAD CADA CUAL CON SU PROJIMO, porque somos miembros los unos de los otros.
Hablen entre ustedes con salmos, himnos y cantos espirituales, cantando y alabando con su corazón al Señor.
Que no hablen mal de nadie, que no sean pendencieros, sino amables, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres.
Así hablen ustedes y así procedan, como los que han de ser juzgados por {la} ley de la libertad.
Hermanos, no hablen mal los unos de los otros. El que habla mal de un hermano o juzga a su hermano, habla mal de la ley y juzga a la ley. Pero si tú juzgas a la ley, no eres cumplidor de la ley, sino juez {de ella.}
Porque: El que quiere amar la vida, y ver los días buenos, refrene su lengua de mal, y sus labios no hablen engaño;