'Hermón' en la Biblia
"Tomamos entonces la tierra de mano de los dos reyes de los Amorreos que estaban del otro lado del Jordán, desde el Valle del Arnón hasta el Monte Hermón
(los Sidonios llaman Sirión, a Hermón, y los Amorreos lo llaman Senir):
desde Aroer, que está a la orilla del Valle del Arnón, hasta el Monte Sion, es decir, Hermón,
a los Cananeos {que estaban} al oriente y al occidente, a los Amorreos, a los Hititas, a los Ferezeos y a los Jebuseos en la región montañosa, y a los Heveos al pie del Hermón en la tierra de Mizpa.
desde el Monte Halac, que se levanta hacia Seir, hasta Baal Gad en el Valle del Líbano, al pie del Monte Hermón. Capturó a todos sus reyes, los hirió y los mató.
Estos son los reyes de la tierra a quienes los Israelitas derrotaron, y cuya tierra poseyeron al otro lado del Jordán, hacia el oriente, desde el Valle del Arnón hasta el Monte Hermón, y todo el Arabá hacia el oriente:
y que gobernaba en el Monte Hermón, en Salca y en todo Basán, hasta las fronteras del Gesureo y del Maacateo, y la mitad de Galaad, {hasta} la frontera de Sehón, rey de Hesbón.
y la tierra de los Giblitas, y todo el Líbano hacia el oriente, desde Baal Gad al pie del Monte Hermón, hasta Lebo Hamat.
También Galaad y el territorio de los Gesureos y los Maacateos, y todo el Monte Hermón, y todo Basán hasta Salca;
{Estas naciones son:} los cinco príncipes de los Filisteos, todos los Cananeos, los Sidonios y los Heveos que habitaban en el Monte Líbano, desde el Monte de Baal Hermón hasta Lebo Hamat.
Los hijos de la media tribu de Manasés habitaron en la región; eran muy numerosos desde Basán hasta Baal Hermón, Senir y el Monte Hermón.
Y como becerro hace saltar al Monte Líbano; Y al Monte Sirión (Hermón) como cría de búfalo.
Dios mío, mi alma está en mí deprimida; Por eso me acuerdo de Ti desde la tierra del Jordán, Y {desde} las cumbres del Hermón, desde el Monte Mizar.
El norte y el sur, Tú los creaste; El Tabor y el Hermón aclamarán con gozo a Tu nombre.
Es como el rocío de Hermón, Que desciende sobre los montes de Sion; Porque allí mandó el SEÑOR la bendición, la vida para siempre.
{Ven} conmigo desde el Líbano, esposa {mía}, Ven conmigo desde el Líbano. Baja desde la cumbre del Amaná, Desde la cumbre del Senir y del Hermón, Desde las guaridas de los leones, Desde los montes de los leopardos.